Rusia decidió este viernes incluir en su ‘lista negra’ a República Checa y Estados Unidos, a raíz de las últimas disputas diplomáticas que han enfrentado al Kremlin con diferentes países de su entorno, los cuales se posicionaron del lado de Washington cuando decidió expulsar a diplomáticos rusos.
Esta designación, con la que Rusia restringe el número de diplomáticos de esos países dentro de sus embajadas y el personal local que puede contratar, forma parte de una norma promulgada hace un mes para limitar la capacidad de estas delegaciones diplomáticas de Estados “poco amistosos”.
Los primeros países en entrar en dicha lista han sido finalmente República Checa, con quien Rusa mantiene desde hace semanas un enconado litigio diplomático y Estados Unidos, a quien se le ha prohibido contratar personal ruso para su embajada.
Se trata de una cuestión “definitivamente cerrada e irrevocable”, ha enfatizado la portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, quien ha informado que Estados Unidos tiene hasta el primero de agosto para cumplir con la medida, recoge la agencia rusa de noticias Sputnik.
La medida socava las ya difíciles relaciones
Por su parte, República Checa ha criticado la decisión de las autoridades rusas de incluirle en esa lista de “países hostiles” y ha lamentado que con ello solo se empeorarán las ya delicadas relaciones que ambos mantienen.
“El Ministerio de Asuntos Exteriores de República Checa cataloga la decisión de Rusia como un paso más hacia el empeoramiento de las relaciones no solo con nosotros, sino también con la UE en su conjunto y sus aliados”, señala el comunicado de las autoridades checas. “Esta medida repercutirá de forma indirecta en el posible desarrollo de los contactos entre los ciudadanos de a pie, en el turismo y en el desarrollo de las relaciones comerciales”, recalca el escrito.
Desde Bruselas, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha querido mostrar su apoyo al Gobierno checo tras la medida de Moscú, la cual ha considerado un “vano esfuerzo por dividir a la UE”.
“La decisión del Gobierno ruso respecto a ‘Estados que cometen actos hostiles’ es otro paso de su escalada para socavar las relaciones diplomáticas. Los esfuerzos por dividir a la UE son en vano. Plena solidaridad con la República Checa”, ha escrito Michel en su cuenta de Twitter.
El pasado 17 de abril, Praga denunció la presunta implicación de Moscú en las explosiones que causaron dos muertos en un almacén de municiones en Vrbetice, en el este de Republica Checa, en 2014, y expulsó a 18 empleados de la Embajada rusa. Por su parte, Moscú, quien siempre ha considerado estas acusaciones “absurdas”, respondió echando a 20 diplomáticos checos.
En solidaridad con Praga, los países bálticos anunciaron que expulsarán a cuatro diplomáticos rusos. Algo que con anterioridad realizó también Polonia como muestra de apoyo a Estados Unidos.