Los líderes del G7 se comprometerán hoy a utilizar todos sus recursos para evitar que una pandemia mundial vuelva a suceder, a través de una declaración calificada de «histórica» que suscribirán en la Cumbre que se celebra en el condado de Cornualles, en el suroeste de Inglaterra.
Los países más industrializados del mundo acordarán la «Declaración de Carbis Bay», un pronunciamiento que establece una serie de compromisos concretos para evitar que se repita la devastación humana y económica provocada por el coronavirus.
Los líderes iniciaron ayer una cumbre en el Reino Unido que se desarrollará hasta el domingo 13 de junio, con el objetivo de coordinar el apoyo y la distribución de las vacunas en todo el mundo, especialmente para los países más pobres.
Tras casi dos años sin reunirse, los jefes de Estado y Gobierno de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido volvieron a sentarse en torno a una mesa redonda tras el recibimiento del primer ministro británico Boris Johnson, anfitrión del evento en la localidad turística de Carbis Bay.
Ayer, los líderes fijaron el objetivo de distribuir mil millones de dosis de vacunas contra el coronavirus y la mitad de las dosis será donada por Estados Unidos, mientras que Reino Unido entregará 100 millones más.
Mientras que hoy, los líderes debatirán sobre la salud global con sus homólogos de Corea del Sur, Sudáfrica, Australia e India, invitados a la cumbre, además del secretario general de la ONU, Antonio Guterres y responsables de organizaciones internacionales.
El científico británico y asesor del Gobierno, Patrick Vallance y Melinda French Gates presentarán las conclusiones del informe realizado por la Asociación de Preparación para Pandemias, un grupo de expertos internacionales provenientes de distintos sectores y conformados a principios de este año por el G7 para prevenir, detectar y responder a futuras pandemias.
El trabajo, titulado «Misión de 100 días para responder a futuras amenazas de pandemias», contiene recomendaciones prácticas sobre cómo los Gobiernos y otros pueden responder rápidamente a cualquier brote en un futuro.
Los primeros 100 días después de la identificación de una amenaza epidémica son cruciales para cambiar su curso e, idealmente, evitar que se convierta en una pandemia.
La declaración de Carbis Bay, que será acordada hoy y publicada mañana junto al comunicado de la cumbre, incorporará además las recomendaciones de este informe y establecerá los demás pasos que tomarán los países del G7 para prevenir una pandemia futura.
Según los científicos, el 75% de las nuevas enfermedades humanas se originan en animales.
Para detener las nuevas enfermedades zoonóticas antes de que pongan a las personas en riesgo, el Reino Unido establecerá un Centro de Innovación y Fabricación de Vacunas para Animales en el Instituto Pirbright en Surrey, al sur de Inglaterra.