La pandemia de covid-19 aumentó el consumo de drogas, al tiempo que fomentó el cultivo ilícito de adormideras para la producción de opio, lo que podría tener repercusiones durante “años”, advirtió la ONU este jueves.
“Los mercados de drogas se reanudaron rápidamente tras las perturbaciones iniciales al comienzo de la pandemia”, escribe la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) en su informe anual. Alrededor de 275 millones de personas consumieron drogas en todo el mundo en el último año, en comparación con 269 millones en 2018, mientras que más de 36 millones de personas sufrieron trastornos por consumo de drogas, según el Informe publicado hoy.
El Informe señaló además que en los últimos 24 años la potencia del cannabis había aumentado hasta cuatro veces en algunas partes del mundo, incluso cuando el porcentaje de adolescentes que percibían la droga como dañina disminuyó hasta en un 40 por ciento, a pesar de las pruebas de que el consumo de cannabis está asociado con una variedad de daños a la salud y otros daños, especialmente entre los consumidores habituales a largo plazo.
“La menor percepción de los riesgos del consumo de drogas se ha relacionado con tasas más altas de consumo de drogas, y los hallazgos del Informe mundial sobre drogas 2021 de la UNODC destacan la necesidad de cerrar la brecha entre la percepción y la realidad para educar a los jóvenes y salvaguardar la salud pública”, dijo el ejecutivo de la UNODC, Ghada Waly.
Según el informe, el porcentaje de Δ9-THC, el principal componente psicoactivo del cannabis, ha aumentado de alrededor del seis por ciento a más del 11 por ciento en Europa entre 2002 y 2019, y de alrededor del cuatro al 16 por ciento en el Estados Unidos entre 1995 y 2019, mientras que el porcentaje de adolescentes que percibían el cannabis como dañino se redujo en un 40 por ciento en los Estados Unidos y en un 25 por ciento en Europa.
Alrededor de 275 millones de personas en todo el planeta consumieron drogas el año pasado. Además, la mayoría de los países han informado de un aumento en el consumo de cannabis durante la pandemia.
En encuestas a profesionales de la salud en 77 países, el 42 por ciento afirmó que el consumo de cannabis había aumentado. También se ha observado un aumento en el uso no médico de medicamentos farmacéuticos en el mismo período. Afganistán, que produce más del 80 por ciento del opio mundial, registró un aumento del 37 por ciento de la superficie de tierra utilizada para su cultivo, a menudo la única opción para estudiantes desocupados u obreros desempleados debido a la crisis sanitaria.
Al mismo tiempo, el coronavirus acentuó “las desigualdades, la pobreza y los problemas de salud mental en todo el mundo, todos ellos factores conocidos para incitar al consumo de drogas”, indica el documento. La mayoría de los países informaron de un aumento del consumo de cánnabis durante la pandemia, según el informe, y señalaron que los jóvenes lo consideraban menos peligroso para la salud “a pesar de las pruebas de que entraña riesgos”.
Publicado en cooperación con Newsweek/ Published in collaboration with Newsweek