El presidente iraní, Ebrahim Raisi, ha descartado a Estados Unidos como una potencia «en declive», mientras los negociadores de ambas naciones intentan encontrar una manera de revivir el acuerdo nuclear del Plan de Acción Integral Conjunto en las conversaciones en Viena.
Hablando con el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, por teléfono el miércoles, Raisi instó a su homólogo a resistir las sanciones de Estados Unidos de la misma manera que lo ha hecho Teherán desde mayo de 2018, cuando el expresidente Donald Trump se retiró del JCPOA y se embarcó en su campaña de «máxima presión» contra Irán.
«Estamos seguros de que Nicaragua también puede superar las amenazas y sanciones de Estados Unidos, ya que hoy Estados Unidos está en declive y se debilita día a día», dijo Raisi a Ortega, según una lectura publicada por la estatal iraní PressTV.
«El sistema hegemónico [internacional] no puede imponer su voluntad a la República Islámica y Nicaragua, ya que los países dependen del voto y el apoyo de sus pueblos, y pueden [por lo tanto] hacer frente a las demandas excesivas de las potencias hegemónicas», agregó Raisi.
Nicaragua fue sometida a sanciones estadounidenses debido a la represión autoritaria de Ortega a los opositores políticos y al fraude electoral. En noviembre, la administración del presidente Joe Biden introdujo nuevas medidas contra el Ministerio Público de Nicaragua y nueve funcionarios del gobierno de Nicaragua.
En un comunicado, el secretario de Estado Antony Blinken dijo que las medidas eran una respuesta a las «elecciones simuladas de noviembre», que siguieron a «meses de represión y el encarcelamiento de 39 personas, incluidos siete posibles candidatos presidenciales, miembros de la oposición, periodistas, estudiantes y miembros de la sociedad civil «.
Ortega le dijo a Raisi que Nicaragua «apoya a la nación iraní en todos los ámbitos internacionales».
Los estrechos lazos de larga data entre las dos naciones han generado preocupación en los Estados Unidos de que Nicaragua esté ofreciendo a Teherán una ventana hacia las Américas, particularmente para los grupos armados aliados de Irán como Hezbollah.
Irán también permanece bajo una amplia gama de sanciones estadounidenses luego de la retirada de Trump del JCPOA. Las conversaciones para reactivar el acuerdo se reanudaron el lunes en Viena: la octava ronda de negociaciones.
Representantes estadounidenses y europeos han advertido que se está agotando el tiempo para llegar a un acuerdo, mientras que funcionarios estadounidenses e israelíes han estado insinuando una acción militar sin una solución diplomática.
Sin embargo, diplomáticos iraníes y rusos han informado sobre desarrollos positivos de la última ronda de conversaciones.
El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Hossein Amir-Abdollahian, dijo el martes: «Las conversaciones de Viena van en una buena dirección … Creemos que si otras partes continúan la ronda de conversaciones que acaba de comenzar con buena fe, llegar a un buen acuerdo para todas las partes es posible.»
Irán ha exigido repetidamente que se levanten todas las sanciones de la era Trump antes de que vuelva a cumplir con las restricciones del JCPOA sobre el programa nuclear de Teherán. Las sanciones que impiden que Irán pueda vender petróleo crudo en el extranjero —un contribuyente vital a los ingresos del gobierno— han sido particularmente castigadoras.
La retirada de Trump del JCPOA y los asesinatos del mayor general Qassem Soleimani y el científico nuclear Mohsen Fakhrizadeh , llevaron a Irán a alejarse cada vez más de los límites del JCPOA.
Irán ha aumentado su arsenal de uranio enriquecido, ha mejorado sus capacidades de enriquecimiento y ha estado enriqueciendo uranio hasta alcanzar una calidad similar a la de las armas. El tiempo de ruptura de Irán, el tiempo necesario para construir una ojiva nuclear, pronto podría ser solo cuestión de semanas, advirtió Blinken.
Publicado en cooperación con Newsweek
