El Gobierno talibán en Afganistán ordenó a las mujeres cubrirse y no salir de casa, denunció este fin de semana la ONU que con ello expresó gran preocupación.
Las autoridades advirtieron que, de no obedecer, castigarán a los hombres de sus familias. La misión de la ONU señala que la medida contradice las declaraciones de los talibanes garantizando el respeto de los derechos humanos de las mujeres y de todos los afganos.
En efecto, la Misión de Asistencia de la ONU en Afganistán (Unama) expresó profunda preocupación este fin de semana tras el anuncio del Talibán, de que las mujeres sólo podrían salir de sus casas “en casos de necesidad”. De acuerdo con la información recibida por la Unama, la medida no es una recomendación sino una directiva formal.
Cuando los talibanes tomaron el poder en agosto de 2021, habían prometido que todas las mujeres gozarían de sus derechos en el ámbito laboral, educativo y social.
CUBIERTAS DE PIES A CABEZA
Los despachos de prensa sobre la nueva normativa reportan que las mujeres deberán usar burkas que las cubran desde la cabeza hasta los pies, y sólo podrán mostrar los ojos, como tuvieron que hacerlo en el período en que los talibanes gobernaron el país, de 1996 a 2001.
“El nuevo atropello contra las mujeres se suma al de no permitir que las niñas asistan a la escuela secundaria, en vigencia desde septiembre pasado, poco después de que los talibanes tomaran el control del país. Con ese mandato, también se prohibió que las maestras regresaran a sus trabajos”, informó Unama.
Esas medidas recibieron una amplia condena en todo el mundo y socavaron las promesas de los talibanes en el sentido de que seguirían estándares internacionales para establecer relaciones positivas en el plano global. Por eso, la misión de la ONU informó que “solicitará reuniones de inmediato con las autoridades talibanes (de facto) para buscar aclaraciones sobre esta decisión”.
CRISIS HUMANITARIA
Además, señaló que llevará a cabo consultas con miembros de la comunidad internacional para determinar las implicaciones de esta orden.
Desde que los talibanes tomaron el poder, los donantes recortaron la asistencia al desarrollo e impusieron sanciones al sistema bancario del país, colocando la economía afgana en situación de colapso.
El 30 de agosto de 2021, el Consejo de Seguridad adoptó una resolución pidiendo a los talibanes que permitieran el tránsito seguro para todas las personas que decidieran salir del país.
Con casi 23 millones de personas en situación de hambre, Afganistán va rumbo a convertirse en la mayor crisis humanitaria del mundo. Incluso, con necesidades superiores a las de Yemen, Etiopía, Siria o Sudán del Sur, según lo indicó la ONU.
Publicado en cooperación con Newsweek en Español