Novak Djokovic, número uno del mundo, fue descalificado ayer cuando perdía ante el tenista español Pablo Carreño Busta por 6-5 en el primer set del partido de octavos de final, luego de darle un pelotazo a una jueza de línea en un arranque de enojo.
El incidente ocurrió después de que Djokovic perdió tres puntos de set durante el servicio de su rival y luego perdió el suyo, dando la ventaja al español; por la frustración, golpeó con fuerza una pelota hacia la parte posterior de la cancha que pegó a una jueza de línea en el cuello, quien cayó gritando. Inmediatamente se disculpó y fue a asistirla cuando ella estaba en el suelo.
Las reglas del Grand Slam establecen: «Los jugadores no abusarán físicamente en ningún momento de ningún oficial, oponente, espectador u otra persona dentro del recinto del sitio del torneo.»
El árbitro del torneo, Soeren Friemel, salió al estadio Arthur Ashe y habló con la jueza de silla Aurelie Tourte antes de una larga discusión con el serbio de 33 años, tres veces ganador del Abierto de Estados Unidos. Djokovic estaba dejando claro que no había tenido la intención de golpear al árbitro, pero según las reglas del tenis, su destino ya estaba sellado. Las reglas del Grand Slam establecen: «Los jugadores no abusarán físicamente en ningún momento de ningún oficial, oponente, espectador u otra persona dentro del recinto del sitio del torneo. El árbitro, en consulta con el jefe de supervisores de Grand Slam, puede declarar una falta por una sola violación de este código».
A pesar de 12 minutos de súplicas, Djokovic fue finalmente descalificado antes de acercarse para estrechar la mano de Carreño Busta y retirarse de la cancha con dificultad. Fue un final increíble para las esperanzas del primer favorito de ganar su título número 18 de Grand Slam, algo que parecía cada vez más probable a medida que avanzaba el torneo.
Foto: Danielle Parhizkaran-USA TODAY Sports
Djokovic merecía ser descalificado del Abierto de Estados Unidos cuando cruzó los límites con su comportamiento impulsivo y golpeó a una jueza con una pelota, aunque el acto no haya sido deliberado, dijo el exentrenador del equipo serbio de la Copa Davis, Bogdan Obradovic. «Él cruzó una línea roja», dijo en una entrevista telefónica con Reuters. «Me da lástima porque estaba en buena forma e iba camino de ganar su décimo octavo título de un Gran Slam, pero las normas sobre prácticas abusivas con raquetas y pelotas son claras y aplican para todos. Él se metió en el barro al cometer un error tonto en circunstancias desafortunadas. Todos somos humanos y todos expresamos nuestras frustraciones algunas veces, pero esa no es excusa para lastimar a alguien, aunque no haya sido intencional».
Los fanáticos serbios salieron en defensa de Djokovic con mensajes en carteles luego del incidente, e incluso algunos sugirieron que la jueza de línea que recibió el pelotazo «exageró el dolor» y reaccionó «como si hubiera sido golpeada con una pelota de fútbol».
Novak Djokovic en sus redes dijo que estaba «triste y vacío» luego de la descalificación. La publicación lee: «Pregunté por la jueza de línea y el torneo me dijo que gracias a Dios se siente bien. Lamento mucho haberle causado tanto estrés. Tan involuntario. Tan incorrecto. No voy a revelar su nombre para respetar su privacidad. En cuanto a la descalificación, tengo que volver a mi interior y trabajar en mi decepción y convertir todo esto en una lección para mi crecimiento y evolución como jugador y ser humano. Pido disculpas al torneo @usopen y a todos los fanáticos por mi comportamiento… lo siento mucho».
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