La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó su primer informe relacionado con la salud de los refugiados y migrantes, el cual arrojó datos preocupantes sobre las millones de personas que se encuentran en esta condición alrededor del mundo.
Según los datos publicados, quienes tuvieron que desplazarse de su país de origen suelen vivir «en situación de vulnerabilidad» por sus malas condiciones de vida y de trabajo, lo que hace que tengan «peor salud que la población de sus países de acogida».
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, advirtió que casi una de cada ocho personas es migrante, lo que da un total aproximado de 1.000 millones de migrantes en el mundo.
«La migración afecta enormemente la salud y el bienestar, y los refugiados y migrantes continúan siendo uno de los grupos más vulnerables y desatendidos en muchos países», remarcó el titular de la entidad sanitaria, quien además solicitó a los líderes de todos los países para que todos puedan acceder a los servicios sanitarios.
En el informe, la OMS da cuenta de las causas que afectan a estos grupos, como las deficiencias en educación, ingresos, vivienda y acceso a los servicios. Esto se agrava si se consideran algunas barreras que deben sortear, como el idioma y la cultura, entre otras.
Con respecto a los trabajadores migrantes, la entidad menciona que «en comparación con sus homólogos no migrantes, utilizaban menos los servicios de salud y corrían más riesgo de sufrir accidentes laborales».
«Muchos de los 169 millones de trabajadores migrantes que hay en el mundo desempeñan trabajos sucios, peligrosos y exigentes y tienen un mayor riesgo de sufrir accidentes laborales, lesiones y problemas de salud relacionados con el trabajo que los trabajadores locales. Esta situación se ve agravada por el hecho de que, a menudo, tienen poco acceso a los servicios de salud«, explicaron.
«Las fronteras de la salud no son las de los países. Por tanto, la situación migratoria no debe ser motivo de discriminación, sino un elemento fundamental para elaborar políticas sobre las que desarrollar y reforzar la atención de salud y la protección social y económica», manifestó Santino Severoni, director del programa de Salud y Migraciones de la OMS.
Desde el organismo advirtieron que esta problemática trae «nefastas consecuencias» para las personas, a la vez que dificulta que se puedan alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible planteados.
En ese sentido, la Dra. Zsuzsanna Jakab reclamó a los países y entidades sanitarias «trabajar con más ahínco para mejorar la salud de los refugiados y migrantes», a la vez que pidió que haya más y mejores datos sobre la salud de esta población.
