Los influencers parecen ganar cada vez más relevancia en las redes sociales. Así lo revela un estudio realizado por la agencia Sortlist, que señala que una de cada cinco personas confía más en ellos que en especialistas.
Este relevamiento, que se realizó con usuarios de las redes sociales de algunos países de Europa que seguían a creadores de contenidos de salud y finanzas, busca conocer cuáles en el poder que tienen en las decisiones de la gente.
A grandes rasgos, el informe menciona que en el último tiempo, Google y las redes sociales se convirtieron en los medios por los que las personas más se informan. En ese sentido, Youtube, Facebook e Instagram aparecen entre las más elegidas para los contenidos de ambas temáticas.
Con respecto a la confianza de los usuarios, “la credibilidad es el factor más decisivo a la hora de elegir a los influencers en salud y finanzas”. En la salud “el número de seguidores es más importante que el contenido”, mientras que en el mundo de las finanzas es al revés.
En ese sentido, el 68% de los encuestados sobre finanzas y el 50% de los encuestados sobre salud respondieron que verifican la información como también los antecedentes de los creadores de contenidos que siguen.
Al ser consultados sobre los motivos que harían que un influencer pierda confianza de su público, los puntos más notorios fueron: sensación de que se sientan falsos; falta de exactitud y veracidad en la información que brindan; y la ausencia de conexión o relación con el contenido que están publicitando.
Sin embargo, al momento de elegir entre un influencer y un especialista, muchos usuarios señalaron que se vuelcan por lo que encuentran en internet por los costos y la dificultad para conseguir una cita con un profesional médico o financiero. Pero remarcan que estos últimos brindan un apoyo más personalizado, confiabilidad y transparencia que lo que se ve en las redes.
Como conclusión final, el informe remarca que aunque los especialistas se mantienen con mayor confianza que los creadores de contenido, los números indican que “esta tendencia podría ir en aumento a medida que el mundo se adentra en el ecosistema digital”.
