La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó un nuevo reporte sobre la situación de la viruela del mono y advirtió que los contagios tuvieron un aumento del 20% en la última semana.
De acuerdo a los datos brindados en conferencia de prensa por el director general de la entidad, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en los últimos siete días se informaron 7.500 casos, una suma superior a la semana anterior, que ya había tenido un incremento similar.
Así, el total de pacientes con la enfermedad notificados llegó a los 35.000 en 92 países y territorios. Además, ya son 12 los fallecimientos en el mundo por el virus.
“Casi todos los casos se notifican en Europa y las Américas, y casi todos los casos se siguen notificando entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, lo que subraya la importancia de que todos los países diseñen y brinden servicios e información adaptados a estas comunidades que protejan la salud, los derechos humanos y la dignidad”, explicó el titular de la OMS.
En ese sentido, resaltó que todos los países “deben ser asegurarse de que estén preparados para la viruela del simio y detener la transmisión utilizando herramientas de salud pública efectivas”, con el fin de evitar su propagación.
Por otro lado, Ghebreyesus señaló que “las vacunas también pueden desempeñar un papel importante en el control del brote”. Sin embargo, pese a que aumenta su demanda en vario países, “el suministro de vacunas y los datos sobre su efectividad son limitados, aunque estamos empezando a recibir datos”.
“La OMS ha estado en estrecho contacto con los fabricantes de vacunas y con países y organizaciones que están dispuestos a compartir dosis. Seguimos preocupados de que se repita el acceso desigual a las vacunas que vimos durante la pandemia de COVID-19, y que los más pobres se sigan quedando atrás”, advirtió.
Mientras se avanza en las investigaciones para conocer el origen de la viruela del mono, en los últimos días especialistas convocados por la OMS anunciaron un cambio en los nombres de las variantes.“ El clado anteriormente conocido como la cuenca del Congo o el clado de África Central ahora se denominará clado I, mientras que el clado de África occidental se denominará clado II”, expresó el titular del organismo.
Esto se debe a que según las recomendaciones de la propia OMS, las denominaciones de los virus y enfermedades recientes no deben ser “ofensivas para ningún grupo cultural, social, nacional, regional, profesional o étnico y de atenuar las repercusiones negativas de estas denominaciones en el comercio, los viajes, el turismo y el bienestar de los animales”.