Luego de las polémicas declaraciones sobre la causa Vialidad y el fiscal Diego Luciani, el presidente Alberto Fernández reveló que recibió amenazas de muerte que están siendo investigadas por la Policía Federal.
El mandatario se refirió a la situación de violencia que transita el país, especialmente en el ámbito político, y contó que en varias ocasiones fue blanco de mensajes intimidatorios.
“Hay gente muy enloquecida, y hay que tener cuidado. Todos recibimos amenazas”, contó en diálogo con El Destape Radio. Al respecto, contó que no puede brindar mayores detalles “porque temo estar interfiriendo en la investigación” que llevan a cabo las fuerzas de seguridad, aunque admitió que “no me preocupo mucho”.
Fernández se refirió al rol de la dirigencia política para calmar la violencia, y mencionó el caso del diputado del PRO Francisco Sánchez, quien reclamó que se trate su proyecto de ley para que los delitos como en que se le acusa a la vicepresidenta Cristina Kirchner sea considerado traición a la Patria y se lo condene con pena de muerte.
“Es todo un delirio, un disparate. Lo único que deja en evidencia es el nivel de ignorancia que hay en muchos”, expresó. Y agregó: “La democracia nos exige un nivel de convivencia que nosotros debemos respetar, y empieza por no insultarnos, maltratarnos, no desgastarnos entre nosotros. Lo que estamos viendo es un caudal de ataques, de agravios, de violencia física inclusiva que es insostenible”.
El presidente apuntó también contra los militantes libertarios, a quienes acusó de promover la violencia hacia el Gobierno. “Van y dejan bolsas simulando que adentro hay cuerpos, las cuelgan de las rejas de la Casa Rosada, o hay grupitos de 10 que cuando entra un funcionario lo insultan y le patean el auto. ¿Qué tipo de libertad están promoviendo ellos?”, criticó.
Además, el mandatario señaló que todos estos hechos pueden ser contravenciones por intimidación pública e incitación a la violencia, y mencionó que los discursos de odio “muchas veces terminan siendo justificados por la prensa”.
“Ayer (por la entrevista en TN) me decían todo el tiempo ‘la gente está muy mal’. Yo veo mucha gente que ha recuperado el trabajo, que la economía crece, que tenemos problema por resolver de la inflación y mejorar la distribución de los ingresos que estamos atendiendo, las jubilaciones y los salarios crecen más que la inflación. Pero si uno todos los días dice que estamos mal, la percepción es que esta todo dado vuelta”, afirmó.