Un informe de la agencia Reuters asegura que numerosos bares de Alemania han decidido no transmitir los partidos del Mundial de Qatar, como una medida “ética” en protesta por las violaciones a los derechos humanos en el país anfitrión.
Qatar, primer país de Medio Oriente en organizar un Mundial de la FIFA, está siendo fuertemente criticado desde hace tiempo por la comunidad internacional por el trato que da a los trabajadores extranjeros que llegaron al destino para las obras que requiere el certamen y por sus restrictivas leyes. Asociaciones, gobiernos e incluso equipos de fútbol participantes están visibilizando estos reclamos.
En diálogo con Reuters, Fanny Delaune, propietaria del bar deportivo «Babel», de la ciudad de Bonn, afirmó: “Se han violado demasiados derechos humanos y, desde un punto de vista ético, no puedo justificarlo. Algunos lo entienden y otros lo verán de todos modos, pero en última instancia, es mi bar y mi decisión».
En el mismo sentido, Tobias Epping, propietario del bar «Die Wache», explicó que hará lo mismo: «No sólo yo, sino también mis clientes habituales a los que pedí que votaran en Facebook e Instagram. Decidimos no mostrar el Mundial porque hubo un punto en el que dijimos ‘basta’. Desde el punto de vista económico: ¿ha sido una decisión inteligente? Probablemente no. Pero al menos puedes ir a un bar con la conciencia limpia”.
Alemania debutará en la copa el 23 de noviembre contra Japón, como parte del Grupo E, que comparten con España y Costa Rica.
