Martín Redrado dialogó esta mañana con Pablo Rossi en Radio Rivadavia y precisó que «Argentina hoy está transitando un alto nivel de incertidumbre y por lo tanto, lo que debe dar la política pública es certidumbre en términos de cuál es esa trayectoria».
En esa línea remarcó que «esto de ir llevando las cosas día a día no da ese sendero de previsibilidad que necesita cualquier ciudadano de la Argentina para tomar decisiones de consumo, de inversión» y agregó que «cuando uno tiene un laberinto como el que se presenta hoy en la política económica, falta de reservas, recesión por un lado, deuda pública muy elevada por otro, altísima inflación, se sale por arriba«.
En ese sentido, resaltó que «hoy Argentina tiene una oportunidad realmente única en término de poder proveer gas natural licuado a la Unión Europea» e indicó que » en la Unión Europea se acerca un invierno muy crudo», por lo que, afirmó que «yo si tuviera poder político lo que le diría al gobierno es que envié una ley al Congreso para generar y dar las garantías para las próximas décadas respecto a la construcción de los gasoductos que permitirían a la Argentina exportar gas natural licuado«.
«Siéntense el presidente, el ministro de Economía con los líderes europeos para que puedan construir este gasoducto», agregó y afirmó que «Argentina puede estar rápidamente con un sendero de poder exportar 10 mil millones de dólares e inversiones constantes y sonantes». «Claro, que para esto se necesitan leyes», marcó y en consecuencia, dejó en claro que «la salida no es restringir más sino plantear en un mundo complejo y de incertidumbre dónde están las oportunidades y dónde Argentina puede producir más dólares».
En ese punto, el extitular del Banco Central explicó que «la señal que estoy planteando es cómo ampliamos la oferta de divisas, cómo generamos que nuestra economía tenga un sentido de dirección que no la ha tenido en los últimos diez años» y aclaró que «esto tampoco puede asignarse a este período», debido a que según puntualizó: «Argentina tiene una tendencia, diría casi estructural, al estancamiento económico y a la alta inflación». «Pero, está claro que venimos pasando de 25% de inflación, como se tuvo en la primera parte de la década pasada, al 50% y ahora, al 100%«, subrayó y advirtió que «si nuestros líderes políticos no se dan cuenta del camino que está tomando la economía, Argentina tiene sin duda por delante: una mayor recesión, que parece que es el camino que está tomando el gobierno, elegir la restricción tanto de la oferta como de la demanda, ya que, el salario viene creciendo por detrás de la tasa de inflación«.
EL FMI Y LA ARGENTINA
Redrado calificó como «bastante mediocre» el plan del FMI con la Argentina y contó que «he conversado con funcionarios del Fondo que me han dicho, esto es lo mejor que podemos hacer» al tiempo que destacó que «en el sendero fiscal hay un reducción del déficit fiscal» por lo que sostuvo que «se va a cumplir la meta fiscal».
En ese punto precisó que «son reducciones de partidas que no se han ejecutado: cuánto gasta cada ministro y si no ha gastado no se le ha dejado esa pauta para el resto del año» e hizo hincapié en que «sin duda falta una reingeniería del sector público, pero estamos al final de un gobierno y esto es algo para hacer al principio con poder político» y detalló que «con reingeniería me refiero a mirar repartición por repartición, trabajar sobre la transparencia de las compras públicas, es decir, que todos podamos estar enterados sobre lo que compra cada uno de los ministerios«.
LAS CINCO LEYES PARA TRANSFORMAR LA ARGENTINA
En ese contexto, consideró que «hay que hacer una política de shock en términos de leyes» y recordó que «yo vengo sosteniendo que Argentina tiene salida a través de cinco leyes: una ley que marque un cambio en la capacidad o no del Banco Central en materia de emisión monetaria, en gasto público hay que empezar con la desindexación del gasto, en materia de capitalización de deuda hay que empezar un programa que permita a la deuda transformarla en inversión productiva, es necesario otra ley de simplificación impositiva: reducción de impuestos, ampliación de la base de tributación, otra ley que marque en cero las retenciones al incremento de exportaciones tanto sea del agro como de la industria, de los servicios, de los combustibles y hay que redondear con una ley nacional de infraestructura que marque cuáles son las principales obras públicas«.
