A tres días de la final del Mundial de Qatar 2022, se encendieron algunas alarmas en la Selección de Francia debido a que varios jugadores comenzaron a tener síntomas de una enfermedad conocida como “virus del camello”.
Dayot Upamecano y Adrien Rabiot fueron los primeros afectados, quienes se vieron imposibilitados de jugar frente a Marruecos. Y ahora se sumó Kingsley Coman, quien sería duda para enfrentar a Argentina el próximo domingo.
En el combinado francés se encuentran trabajando para cuidar a los tres futbolistas, quienes según contó el técnico Didier Deschamps, se encuentran “aislados” para cuidarlos y evitar que haya nuevos casos.
“Estamos tratando de tener cuidado para que no se propague y los jugadores han hecho un gran esfuerzo en la cancha y obviamente sus sistemas inmunológicos se resienten”, contó el DT.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el nombre real del “virus del camello” es síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS, por sus siglas en inglés).
Se trata de una enfermedad respiratoria vírica, provocada por un tipo de coronavirus zoonótico, que se ha detectado en dromedarios en varios estados de Oriente Medio, África y Asia Meridional.
La primera vez que se lo detectó fue el Arabia Saudita en el año 2012, y desde ese entonces se han registrado casos en 27 países, entre ellos Francia y Qatar, sede del Mundial de Qatar 2022.
Este virus se transmite de animales a las personas por contacto directo o indirecto con dromedarios infectados. Pero también de persona a persona, por contacto directo o en entornos de salud.
De acuerdo a las estadísticas difundidas por la OMS, cerca del 35% de los pacientes que contrajeron el “virus del camello” han fallecido.
Los síntomas habituales de esta enfermedad son fiebre, tos y dificultad respiratoria, aunque también se han registrado personas con neumonía o problemas gastrointestinales, como puede ser diarrea.
