A sus 29 años, ocupa el puesto #35 del ranking ATP y es uno de los favoritos del tenis argentino.
Nació en Bahía Blanca en una familia de tenistas pero, a pesar de toda predicción, el deporte que le gustaba era el básquet. Fue su talento en las canchas de tenis y en los torneos juveniles lo que lo llevó a ser uno de los íconos del tenis argentino y del mundo. Con los años, las cifras fueron mejorando y rompió récords personales como ganar la copa Davis en 2016, ganar su primer título en San Pablo en 2019 y alcanzar el puesto 20 del ranking ATP mundial por unos meses. Hoy, a sus casi 30 años, está viviendo uno de los mejores momentos de su carrera y divide su vida entre sus dos grandes amores: el tenis y la modelo Stephanie Demner, su futura mujer.
¿Cuándo te diste cuenta de que te ibas a dedicar al tenis?
Es difícil saberlo. De chico hacía varios deportes y el que más me gustaba era el básquet, pero de repente empecé a competir más en tenis porque realmente me iba bien. No tengo mucho recuerdo de si en el básquet podría haber hecho carrera pero creo que el tenis ha funcionado bien. A partir de los 10 años empecé a ir a torneos y me iba bien en la mayoría entonces desde entonces tuve que basar mi carrera en el tenis.
¿Cuál fue el momento más difícil de tu carrera?
Fue en el 2014 que dejé de jugar tres meses. Fue un momento que pensé que no iba a poder superar nunca porque me sentía mal, no podía jugar y realmente se me hacía muy cuesta arriba poder entrenar. Incluso llegué a decir que abandonaba el tenis. Pero poco a poco empecé a jugar de nuevo y me lo empecé a tomar de una manera diferente. Creo que ese momento marcó un antes y un después y desde ahí pude empezar a disfrutar un poco más.
¿Cuál fue la clave para poder superar ese momento?
Mi familia, mis amigos y todo el apoyo que tuve de gente que realmente me quiere y me quiso ayudar en ese momento. Ellos saben que yo voy a estar eternamente agradecido. Me vinieron a buscar a mi casa e intentaron que yo pueda retomar el camino del deporte que era el camino que siempre me había dado muchas alegrías. Y también mis entrenadores, que siempre quisieron lo mejor para mí, y me fueron llevando por este camino que es duro y que pude ir transitando mejor cuando pasaron los años.
¿Alguien que admires y por qué?
Michael Jordan. Me gusta mucho todo lo que ha dejado en el deporte, es un jugador que ha cambiado para siempre eso y lo admiro mucho. También a todos los jugadores que han cambiado el tenis para siempre y cuya huella no va a irse nunca. Han puesto una vara tan alta que ahora el tenis está en el mejor momento de su historia y eso es algo espectacular.
¿Algún rival con el que te gustaría enfrentarte?
No, creo que me he enfrentado a todos. Siempre es especial jugar con Roger Federer, Rafa Nadal y Novak Djokovik, los grandes jugadores del circuito, porque es una gran posibilidad para aprender.
¿Algún jugador histórico al que te hubiera gustado enfrentarte?
Me hubiera gustado jugar con Vilas, porque me han dicho que era una roca y que destruía a los rivales. Somos de otras épocas y no será posible, pero él también ha hecho historia en el tenis argentino y lo admiro.
¿Cómo te preparás antes de cada partido?
Tengo una rutina muy sencilla: despertarme 4 o 5 horas antes del partido, ir a la cancha, hacer un poco de preparación física, trabajar con el fisioterapeuta si tengo algún dolor en alguna parte del cuerpo y escuchar música tranquilo en la sala de jugadores hasta el momento del partido.
¿Qué tanta presión sentís al jugar un torneo en la Argentina?
Un poco porque te viene a ver mucha gente conocida que quiere verte ganar. Pero también sé que es un torneo que vengo jugando hace mucho tiempo y vengo aprendiendo cómo manejar ese tipo de presión. Lo único que queda es tratar de entrenar de la mejor manera posible para poder estar preparado para el día del partido.
¿Algún objetivo especial para este año?
Seguir jugando estos torneos, seguir mejorando mi nivel de tenis y saber que el resultado va a ser una consecuencia de las cosas que haga en los entrenamientos y de los hábitos que tenga afuera. Ojalá pueda mantener el nivel de concentración y de pasión que le estuve metiendo estos últimos años que me hicieron llegar hasta acá.
¿Qué significa el tenis para vos?
Es mi vida. Hoy por hoy estoy las 24 horas pensando en eso y ocupa todo mi día, y eso es lo que me permitió estar donde estoy ahora.
Agradecimientos: ATP. / Gentileza: Revista Mustique.