Según lo informó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) de Chile, el país registró un alza del 12,8% en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), la inflación más alta en tres décadas. Puntualmente, la mayor desde 1991.
En diciembre, los aumentos promedio fueron del 0,3% y aseguran que se explican básicamente por los incrementos en los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas, es decir, los productos que más afectan a la canasta básica de los sectores de menores recursos. También hubo fuertes alzas en recreación y cultura y en otros bienes y servicios diversos.
En ese sentido, el reporte detalla: «En el último mes del año, seis de las doce divisiones que conforman la canasta del IPC aportaron incidencias positivas en la variación mensual del índice, cinco presentaron incidencias negativas y una registró nula incidencia». Pero hubo algunas bajas, como transporte y vestuario y calzado.
Chile habitualmente es uno de los países más estables de la región en materia de precios, y la inflación meta de su Banco Central es de entre el 2% y el 4%.La de 2022 triplicó la más alta de las expectativas.
Más allá de los fenómenos internos, el mundo está sumergido en una crisis económica con efectos inflacionarios como consecuencia de la guerra en Ucrania y las dificultades en las cadenas de suministros.
AYUDA SOCIAL
En este marco, el presidente Gabriel Boric, que había criticado fuertemente a la Argentina por su política de otorgar planes sociales, tuvo que dar marcha atrás con sus expectativas de gestión y anunció un paquete de medidas destinadas a dar asistencia social a las familias, y eso incluye aportes monetarios directos.
Además de la inflación, el mandatario enfrenta una fuerte caída de popularidad, que tocó su mínimo tras la derrota en el plebiscito para reformar la Constitución. Luego logró recuperar algo de terreno con el anuncio del proyecto para estatizar las jubilaciones, pero la economía lo devolvió a su piso ante la opinión pública.
«Estamos viviendo momentos difíciles; el primer semestre va a ser desafiante y el alza del costo de la vida es un desafío para todas las familias chilenas», sostuvo Boric al lanzar el plan en el que se destaca el Aporte Familiar Permanente, que desde marzo alcanzará a más de 1,5 millones de hogares.
Otro punto importante del programa es la creación del Bolsillo Familiar Electrónico, una transferencia estatal por ocho meses para ayudar a enfrentar la inflación. Y a esto se suman la Asignación Familiar; el Subsidio Único Familiar; descuentos en medicamentos; la ampliación del programa de alimentación para estudiantes; y un fondo de garantías para créditos en el sector construcción (en este caso, deberá pasar por el Congreso).