Cineworld cerrará esta semana todas sus pantallas en Estados Unidos, Reino Unido e Irlanda después de que los estudios de cine hayan retirado grandes estrenos como la última película de James Bond, dijo una persona familiarizada con la situación.
La cadena de cines estadounidense Regal, de la que Cineworld es la propietaria, comenzó a reabrir en julio tras un alivio de las restricciones impuestas por la COVID-19. Emplea a 37.482 personas en 787 emplazamientos en EEUU, Reino Unido y Europa central, con 546 instalaciones en América.
El lanzamiento de la nueva película de James Bond, «No Time To Die», se retrasó hasta el próximo año, aplastando las esperanzas de un repunte de la industria en 2020, mientras las crecientes tasas de infección por coronavirus están provocando nuevas restricciones y que los espectadores se alejen de las salas.
Los esfuerzos para que el público vuelva a los cines han resultado decepcionantes y muchas compañías de cine medianas y pequeñas han dicho que no pueden sobrevivir al impacto de la pandemia.
El periódico británico The Sunday Times dijo que la compañía, que cotiza en la bolsa de Londres, había escrito al primer ministro, Boris Johnson, y al ministro de Cultura, Oliver Dowden, para advertir que la empresa se estaba volviendo inviable.
El 24 de septiembre advirtió a los inversores que podría necesitar recaudar más dinero si sus salas se veían obligadas a cerrar de nuevo, después de haber sufrido una pérdida de 1.640 millones de dólares en el primer semestre. Sus acciones han caído un 82% este año.
Los esfuerzos para que el público vuelva a los cines han resultado decepcionantes y muchas compañías de cine medianas y pequeñas han dicho que no pueden sobrevivir al impacto de la pandemia.
Cineworld dijo que «Tenet», un thriller de espionaje de Christopher Nolan, era una prueba para la industria tras convertirse en el mayor estreno a finales de agosto desde que estos se interrumpieran en marzo. Pero el aplazamiento de Bond, además de los retrasos en otros grandes estrenos como la película de superhéroes «Black Widow» y «West Side Story» de Steven Spielberg dan a los amantes del cine pocas razones para volver.
El presidente ejecutivo de Cineworld dijo que no tenía más opción que cerrar salas en el Reino Unido y Estados Unidos porque la cadena de cines estaba perdiendo demasiado dinero como para mantenerlas abiertas.
«Hemos llegado a una etapa en la que no tenemos alternativa, fue una decisión muy, muy difícil para nosotros, principalmente en vista de las medidas que tendremos que tomar con los empleados», dijo el lunes el presidente ejecutivo Mooky Greidinger a Sky News. «Desde el punto de vista de la liquidez, estábamos perdiendo montos mucho mayores cuando estábamos abiertos que cuando estábamos cerrados».
La segunda cadena de cines más grande del mundo dijo que los reparos de los estudios en seguir adelante con estrenos importantes, como la nueva película de James Bond, los había dejado sin más opción que cerrar los 536 cines Regal en Estados Unidos y sus 127 salas Cineworld y Picturehouse en el Reino Unido a partir del 8 de octubre.
Greidinger dijo que tomaron esta difícil decisión para asegurar el futuro a largo plazo de la empresa. «Nuestra responsabilidad como gerencia es realmente ver cuál es la mejor manera de que la compañía salga adelante», afirmó.
«Obtendremos la liquidez que necesitamos, tenemos el apoyo total de los bancos que están trabajando con nosotros, muchos fondos. Pero debemos ser cuidadosos y actuar de manera responsable. Con esta medida, estamos fortaleciendo la posición de la compañía», agregó.
Te puede interesar: Disney recortará su fuerza laboral en 28.000 empleados debido a golpe de coronavirus.