El Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) presentó el Plan Federal Agroindustrial 2023/2033, con el cual busca generar un aumento en las exportaciones y nuevos empleos en el sector en los próximos 10 años.
Este programa fue creado en conjunto por las distintas entidades de las economías agroindustriales que lo conforman, con la mira puesta en “contribuir al desarrollo de la economía nacional”.
Con este plan, que incluye 40 propuestas divididas en siete pilares, cuyo objetivo es generar 100 mil millones de dólares anuales en exportaciones agroindustriales, forestales y pesqueras y 878 mil empleos nuevos para 2033.
Así, traería “efectos económicos, sociales y fiscales significativos y permitiría el desarrollo de la bioeconomía en todo el país”.
“Es el fruto de un año de trabajo entre todas las entidades que forman el Consejo y representan a las cadenas de valor agroindustriales de todo el país. También se realizaron consultas con otras entidades y referentes para buscar integrar sus visiones”, expresó el coordinador general del CAA, José Martins.
Al respecto, destacó que “cada estudio, cada proyecto de ley, cada investigación que generamos desde el CAA tiene como objetivo colaborar con el desarrollo de las economías agroindustriales, forestales, pesqueras y de la bioenergía”. “Hemos identificado las necesidades y oportunidades concretas de cada producción y lo que podríamos aportarle a la Argentina”, agregó.
Los siete pilares sobre los que se basa este Plan Federal son: desarrollo agroindustrial federal, productivo, innovador, inclusivo y sustentable; desarrollo exportador e inserción internacional; seguridad alimentaria e integración productiva y social; sostenibilidad ambiental y social, conectividad y el desarrollo con igualdad laboral; y otros tres con propuestas en logística, infraestructura, innovación tecnológica y el rol del Estado.
“La Argentina, en los últimos 20 años ha perdido participación en el mercado internacional; se produjo una concentración de las exportaciones y de los destinos; y se observa un bajo valor agregado en lo exportado. Desde el sector agroindustrial estamos listos para revertir esta situación, y promover un avance sostenible en la industrialización de granos, bioenergías, economías regionales, forestal y pesca”, señaló Gustavo Idígoras, coordinador Técnico del CAA.
Además, Martins hizo hincapié en la necesidad del sector de “contar con una macroeconomía estable, infraestructura competitiva, inversión pública orientada a la producción; y una política monetaria, crediticia, fiscal consistente con la producción y comercio exterior expansivo, incluyendo un tipo de cambio único y competitivo”.
CUÁLES SON LAS PROPUESTAS
En lo que respecta a desarrollo productivo, la CAA propone medidas con incentivos de inversiones y de adopción de buenas prácticas agropecuarias y de servicios ecosistémicos. También garantizar el acceso de insumos nacionales e importados sin restricciones, y una ley de riesgo agropecuario y cambio climático, debido a las consecuencias de las últimas sequías.
En las exportaciones, plantearon estrategias de promoción comercial y negociaciones internacionales para la apertura de mercados, con hincapié en la necesidad de una agenda internacional con el Mercosur; además de posicionar la marca país.
Por otro lado, en seguridad alimentaria e integración productiva y social, trabajaron junto con organizaciones como la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), para “delinear una política de integración productiva y social” a partir de la producción y comercialización de alimentos variados y sanos de agricultores familiares y agroindustrias locales, reduciendo la importación de alimentos de otras zonas.
También puntualizaron en mejorar la logística e infraestructura exportadora, con obras viales y ferroviarias que incluya a los caminos rurales, rutas y autopistas nacionales y provinciales; y reducir los costos del transporte fluvial por la Hidrovía Paraguay-Paraná.
Un punto importante se relaciona con los recursos naturales y medioambiente, ya que proponen soluciones “basadas en ciencia y en la naturaleza” con incentivos para disminuir la dependencia de combustible fósil y alcanzar la carbono neutralidad para el año 2050 “de una manera sostenible e inclusiva”.
Además, puntualizaron en promover la inclusión de las mujeres en los distintos roles de la cadena del sector agroindustrial; e impulsar la innovación tecnológica, como la protección de propiedad intelectual en especies autógamas y el desarrollo de avances científicos.
(Con información de www.noticiasargentinas.com)
