Hace algo más de tres décadas, el turismo ufológico desembarcó en la Argentina a partir de la masificación del fenómeno OVNI. El éxito de la película “E.T.” y una serie de coberturas televisivas en el Cerro Uritorco (el reconocido cronista José de Zer), en Córdoba, crearon las condiciones para que algunas personas decidieran viajar exclusivamente para avistar o incluso tomar contacto con algún Objeto Volador No Identificado (OVNI o “UFO”, según la sigla en inglés que da nombre a la “ufología” y al “turismo ufológico”).
Pero en las últimas semanas, luego de que el Gobierno de los EEUU admitiera el derribo de tres objetos desconocidos, la tendencia parece haberse acelerado, y se estaría combinando con el deseo de experimentar intercambio cultural durante los viajes.
Una encuesta reciente realizada por la plataforma de alojamientos Booking asegura que en 2023 cada vez más argentinos manifiestan su deseo de avistar OVNIS como parte de su experiencia de viaje.
Un 45% de los más de 1.000 consultados quienes aprovechar sus vacaciones para un avistaje de naves extraterrestres.
Estos, sostienen, puede estar ligado a la necesidad creciente de vivir “experiencias extremas”. Por ejemplo, el 60% quiere probar los platos más exóticos, como el chile más picante del mundo.
Pero también al mencionado deseo de conocer nuevas culturas: “un 56% en Argentina quiere experimentar un choque cultural total en 2023, ya sea viajando a algún lugar con experiencias culturales e idiomas completamente diferentes (58%) o recorriendo ciudades menos conocidas con atracciones por descubrir (36%)”, indican.
Asimismo, otro de los motivos puede estar ligado a la búsqueda de unas “vacaciones únicas que impacten, sorprendan y encanten”. Un 74% quiere que ese destino lo saque de su zona de confort. De hecho, un 26% piensa comprar en 2023 un pasaje de “solo ida”, para definir el viaje mientras se realiza.
Desde luego, Córdoba está a la cabeza de los destinos ufológicos argentinos, pero hay otros en crecimiento, tal como la ciudad de Cachi, en Salta, donde está el primer “ovnipuerto” del país; Victoria, en Entre Ríos, donde está el primer museo argentino del OVNI; e incluso la localidad bonaerense de Ituzaingó, donde recientes avistamientos fueron noticia en torno a los campos del INTA.
