El terremoto en Turquía que tuvo una magnitud de 7.8 y que provocó la muerte de 46 mil personas y 105 mil heridos, generó además daños materiales que llegaron a una cifra millonaria.
El número surge de un informe elaborado por el Banco Mundial, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Unión Europea. En consecuencia, la cifra será dada a conocer el próximo 16 de marzo en Bruselas en el marco de una conferencia cuyo objetivo es captar donantes para poder llevar a cabo la reconstrucción de las ciudades afectadas por el sismo.
100 mil millones de dólares es el número que representa los daños materiales que generó el terremoto, acorde con el estudio.
TERREMOTO: EL COSTO PARA LAS ASEGURADORAS
La firma de modelización de catástrofes Karen Clark & Company (KCC) indicó que estima que las pérdidas por el terremoto en Turquía para las aseguradoras serán de 2.400 millones de dólares.
Ese número, según informó la Agencia Reuters, no tiene en cuenta a Siria, donde el sismo se suma a una crisis humanitaria producto de 12 años de guerra.
Acorde con el estudio elaborado por la empresa, los terremotos destruyeron o dañaron en forma severa alrededor de 41.000 edificios en diez de las 81 provincias de Turquía. Además, remarcó que esta catástrofe es el hecho de mayor magnitud sucedido en Turquía desde el terremoto de Erzincan en 1939.
En consecuencia, los costos directos de la destrucción de estructuras físicas en el territorio turco podrían alcanzar el 2,5% del producto interior bruto, o 25.000 millones de dólares, según detalló JP Morgans.
APOYO SALARIAL PARA LOS AFECTADOS POR EL TERREMOTO Y PROHIBICIÓN DE DESPIDOS
Turquía anunció un plan temporal de apoyo salarial y prohibición de despidos en 10 ciudades a fin de cuidar a trabajadores y empresas de las consecuencias financieras a raíz de los terremotos.
En la nación turca, 865.000 personas viven en tiendas de campaña y 23.500 en contenedores al tiempo que 376.000 se encuentran en residencias de estudiantes y pensiones públicas que se ubican fuera de la zona del sismo, acorde con lo comunicado por el presidente Tayyip Erdogan hoy y difundido por la Agencia Reuters.
Acorde con la iniciativa gubernamental, los empresarios que poseen centros de trabajo que padecieron «daños graves o moderados» obtendrán asistencia económica para poder cubrir de manera parcial los salarios de los empleados cuyas horas de trabajo disminuyeron, según indicó el miércoles pasado el Diario Oficial de esa nación.
A su vez, se puso en marcha una prohibición de despidos en 10 provincias afectadas por el terremoto y cubiertas por el estado de emergencia.
Si bien Erdogan prometió que se hará un rápido esfuerzo para llevar adelante la reconstrucción, los expertos consideran que podría ser una receta para otro desastre si se sacrifican las medidas de seguridad en la carrera con el objetivo de reconstruir.
Luego del sismo, tuvieron lugar 90 réplicas, acorde con la Autoridad Turca de Gestión de Desastres y Emergencias (AFAD), que agregaron un nuevo trauma a quienes viven en Antioquía que perdieron sus casas luego del terremoto anterior.
Erdogan, que está en el poder desde hace 20 años, se enfrenta a elecciones presidenciales y parlamentarias en mayo, pero la catástrofe podría generar que los comicios se atrasen.
Previo a los sismos, las encuestas de opinión reflejaban que se encontraba bajo la presión por la crisis del costo de la vida, que podría tornarse aun más grave, debido a que, el desastre perjudicó la producción agrícola.
EL CONTROL EN LAS REDES SOCIALES
Las medidas que tomó el gobierno para controlar la información sobre el terremoto generó ira en una porción de la población.
La autoridad turca de Internet bloqueó el martes el acceso a un popular foro en línea, Eksi Sozluk, 15 días después de bloquear, en forma breve, el acceso a Twitter, argumentando la circulación de desinformación.
La pagina web de la Autoridad de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (BTK) evidencia que el sitio web fue bloqueado a última hora del martes sin especificar ninguna razón explícita. La semana pasada, la policía de Turquía detuvo a decenas de individuos acusados de propagar miedo y pánico «compartiendo mensajes provocadores» acerca del terremoto en las redes sociales.