El Ministerio de Relaciones exteriores de Brasil, a cargo de Celso Amorim, finalmente le puso fecha a la visita de Luiz Inácio lula Da Silva a China, para reunirse con su par Xi Jinping: será del 26 al 31 de marzo.
De acuerdo al comunicado de la Cancillería, Lula fue invitado por el líder chino para concretar la reunión que había sido anunciada desde finales de 2022, una vez que el mandatario brasileño se impuso a Bolsonaro en la segunda vuelta electoral.
Esta será la tercera visita de Lula a China como presidente: la primera fue en 2004; luego regresó en 2009; y ahora la tercera será en 2023. Un viaje por mandato para consolidar lazos con uno de los principales socios comerciales de Brasil.
La agenda prevé reuniones con Xi y con su primer ministro, Li Qiang, así como con el presidente de la Asamblea Popular Nacional, Zhao Leji. Además, concurrirá la sede del Nuevo Banco de Desarrollo, en medio de una reforma estructural de los controles financieros por parte del Gobierno central chino.
¿De qué hablarán Lula y Xi? De acuerdo a la Cancillería, hablarán sobre “el comercio, las inversiones, la reindustrialización, la transición energética, el cambio climático y la paz y la seguridad mundiales”.
En este último punto, vale señalar que Lula se ha ofrecido como mediador entre Rusia y Ucrania para alcanzar un acuerdo de paz, e incluso ha presentado un programa de acción, basado en la conformación de una mesa de negociaciones con líderes de países “neutrales” avalados por las dos partes. Rusia confirmó que estudia la propuesta, que también está en manos de Zelenski y de Joe Biden.
Y, por supuesto, el intercambio bilateral formará parte de la agenda: desde 2009, China es el mayor socio comercial de Brasil por fuera del Mercosur, con un flujo comercial que en 2022 fue de US$ 150.500 millones (un récord).
La delegación brasileña estará integrada por legisladores, gobernadores, ministros y empresarios, quiénes participarán de eventos empresariales, seminarios y la firma de actos intergubernamentales. El año que viene se cumplirán los 50 años del restablecimiento de las relaciones comerciales.
Lo que no se informó es si Lula llevará a la mesa la promesa que le hizo a Luis Lacalle Pou, presidente de Uruguay, de avanzar en un acuerdo entre China y el Mercosur, que permitiría evitar un posible quiebre del bloque por la decisión de Uruguay de avanzar unilateralmente.