El gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Mellella, obtuvo su reelección en los comicios provinciales que se desarrollaron este domingo, con un a victoria aplastante sobre todos sus rivales.
Para dar cuenta de la abismal diferencia, vale señalar que con el 55% de las mesas escrutadas consiguió el 53,58% de los votos, sobre el 9,90% que consiguió el PRO, con Héctor “Tito” Stefani a la cabeza; y el 7,33% de Laura Almirón, la pastora evangélica candidata de Javier Milei.
Además, Juntos por el Cambio, con Pablo Daniel Blanco, sacó un 5,78%; y el Frente de Izquierda, con Lucía Fernández, un 2,77%.
Pero tal vez lo más sorprendente de la elección fueguina es que se produjo un fenómeno poco habitual: el voto en blanco sacó casi un 21%, superando a todos los candidatos de la oposición y convirtiéndose en la segunda opción más votada, lo que parece expresar un fuerte descontento con la oferta política general.
Tras confirmarse el triunfo, Melella aseguró que ese resultado se explica por «el trabajo de todos los días» y por haber construido una alianza que «superó la grieta». Vale recordar que el gobernador un radical kirchnerista.
«La Argentina hoy se debate en esa grieta maldita, pero en Toerra del Fuego conseguimos una propuesta de unidad con gente de todos los sectores, radicales, peronistas, de izquierda, de derecha…», detalló.
Finalmente, se refirió al alto porcentaje de voto en blanco, y concluyó: «Es llamativo el voto en blanco y tenemos que reflexionar. La gente se cansa a veces de los políticos, de la mala onda que a veces tiramos».
