A los 86 años de edad, y luego de una larga enfermedad, este lunes falleció Silvio Berlusconi, el poderoso y polémico magnate italiano de los medios de comunicación y el fútbol, quien fue cuatro veces primer ministro de su país y actualmente formaba parte de la coalición de gobierno.
Según lo informó la agencia ANSA, Berlusconi murió a las 07.30 (GMT) en el hospital San Raffaele de Milán, donde estaba internado desde el viernes. Junto a él se encontraban sus cinco hijos y su hermano Paolo, de acuerdo a la crónica oficial.
Luego de su alejamiento del poder en 2011 en medio de un escándalo sexual (que incluyó acusaciones de abuso de menores) y una profunda crisis, los problemas de salud del magnate se acentuaron. En 2016 tuvo que ser operado del corazón y, además, padeció cáncer de próstata y en 2020 debió ser hospitalizado tres veces tras contraer Covid. Desde abril último, cuando volvió a ser internado en terapia intensiva por un cuadro coronario, se encontraba en una situación muy delicada.
Silvio Berlusconi está en terapia intensiva y hay dudas sobre su verdadero estado de salud
Aún así, llegó a ser el primer ministro de Italia más longevo, a pesar de su afección cardíaca y de haber padecido leucemia. De hecho, pese a todo esto regresó al poder y se convirtió en una pieza clave para formar la coalición de derecha que llevó al poder a Giorgia Meloni.
La muerte de Berlusconi tendrá un alto costo en términos políticos para Italia, y tambipen podría abrir una guerra sucesoria para determinar quién se queda al frente del imperio que construyó en los años ´80 en los medios, luego en el fútbol (era presidente del club A.C. Milan) y también en una gran cantidad de rubros.
Tras conocerse la noticia, aliados y opositores manifestaron sus condolencias. En ese sentido, Meloni afirmó: “Luchamos, ganamos y perdimos muchas batallas con él, y también por él llevaremos a casa los objetivos que nos habíamos fijado conjuntamente. Adiós, Silvio«. Los próximos meses podrían no resultar fáciles para la alianza, que sin dudas buscará reconfigurarse.
En tanto, por su parte, el ex primer ministro Enrico Letta, de la centroizquierda, publicó en Twitter: “Berlusconi hizo la historia de nuestro país. Su muerte marca uno de esos momentos en los que todos, apoyaran o no sus decisiones, se sienten afectados”.
EL IMPERIO
Berlusconi no solo es una pieza clave en la historia moderna de Italia por su actuación política, sino también por su poder construido en base a la construcción de un imperio económico (su reinado corporativo se constituyó en los ‘80, convirtiéndose además en una figura del jet set europeo), y en 1994 se lanzó a la política, siendo elegido por primera vez como primer ministro (1994-1995).
Tal es así, que tras su muerte las acciones de clase A y B de la empresa MFE se dispararon un 10%, ante la expectativa de una posible venta o de una probable fusión con una importante empresa rival.
A Dio, Silvio. pic.twitter.com/hWiSNPCeia
— Giorgia Meloni (@GiorgiaMeloni) June 12, 2023
El emporio familiar es controlado a través de Fininvest, que a finales de 2021 tenía activos por 4.900 millones de euros (US$ 5.300 millones), para gestionar sus intereses. Silvio era dueño del 61,3% del paquete accionario; sus dos hijos de su primer matrimonio, Pier Silvio y Marina, tenían el 7,65% cada uno; y sus otros tres hijos, Barbara, Eleonora y Luigi, un 21,42% en total. Marina preside la firma desde 2005.
Dentro del amplio abanico de compañías de Fininvest, Berlusconi tenía a la principal cadena comercial italiana de medios MediaForEurope (MFE), antes llamada Mediaset. El grupo familiar maneja el 48%, bajo el liderazgo de Pier Silvio, y opera canales de televisión abierta y servicios de «streaming» en Italia y España.
MFE, que en 2021 tuvo ingresos consolidados por también 2.900 millones de euros, también es dueña de la productora y distribuidora cinematográfica Medusa y tiene un 40% del grupo privado italiano de torres de radiodifusión EI Towers. Es, asimismo, el mayor inversor individual en el grupo de televisión alemán ProSiebenSat.1Media (un 29,9%).
Berlusconi falleció en el hospital San Raffaele de Milán (Foto: Reuters)
En MFE, Berlusconi era socio de Vivendi, el gigante de los medios de comunicación, quien ostenta cerca del 23% de las acciones.
Esa inmensa red incluye también al gigante de la industria del libro Mondadori (Fininvest tiene el 53% y, de hecho, también la preside Marina); a la Banca Mediolanum (tiene el 30% y maneja activos por 6.000 millones de euros); el club de fútbol A.C. Monza, equipo que compró en 2017 por 740 millones de euros, después de la venta del Milan. En 2022 logró el ascenso a primera y se ubicó en la mitad de la tabla, garantizando su permanencia en la Serie A.
LOS HEREDEROS
Mientras la serie “Succession” acapara las miradas en la TV mundial, una multimillonaria sucesión real atrae la atención de Italia y Europa. ¿Quién se quedará con el imperio de Silvio Berlusconi?
Por el momento, todas las miradas señalan a su hija Marina, desde hace años presidenta de Fininvest y mano derecha de su padre. Ella, nacida en 1966, dirige también Mondadori; Sin embargo, su hermano de sangre, Pier Silvio (1969), controla el mercado de la televisión, que ha sido históricamente el corazón del imperio Berlusconi.
Como se señalaba, sus otros tres hijos son algo más jóvenes. Barbara, Eleonora y Luigi nacieron en 1984, 1986 y 1988, respectivamente. Todos ellos tienen importantes acciones, pero no han tenido cargos ejecutivos en el grupo. La excepción es Luigi, quien se especializó en finanzas y patrimonios, y representa a su familia en el grupo, con un asiento en el Consejo de Fininvest.
Los biógrafos del ex primer ministro aseguran que Silvio era “el pegamento” que unía a todos sus hijos y la pieza que permitía mantener las tensiones bajo control. Por eso, su muerte podría desatar una guerra familiar, ya que el magnate nunca dijo públicamente quién sería su heredero.
Bajo la dirección de Marina, Fininvest se ha reducido en los últimos años, desprendiéndose de activos que no consideraba estratégicos. Pero, al mismo tiempo, confirmó un proceso de inversión y expansión en MFE para defender en Europa el terreno de la TV frente al crecimiento de las plataformas de streaming internacionales.
“BUNGA BUNGA”
La vida de Berlusconi no estuvo exenta de polémicas, pero tal vez la más resonante y grave de ellas se produjo en 2011, cuando debió dejar su cuarta gestión como primer ministro en medio de un escándalo mediático.
Fue denunciado por realizar enormes fiestas sexuales en las que presuntamente participaban prostitutas, algunas de ellas menores de edad. A esas fiestas se las conocía como “Bunga Bunga”. Berlusconi negó en todo momento las acusaciones y, tras un largo proceso, finalmente fue absuelto.
Pero la Justicia siguió tras las huellas del empresario, que en 2013 finalmente sí fue condenado, pero por fraude fiscal. Eso lo inhabilitó para ejercer cargos públicos, lo que lo llevó a un lustro de cierto ostracismo, dedicado al grupo empresarial y a la política tras bambalinas.
Silvio Berlusconi (Foto: REUTERS/Remo Casilli/File Photo)
La última de sus polémicas se dio en el marco de su participación como miembro de la alianza gobernante, cuando apoyó abiertamente a Vladimir Putin e incluso defendió la invasión a Ucrania, asegurando que el presidente ruso solo quería “poner a gente decente” al poder en Kiev. Meloni lo contradijo abiertamente y ratificó la alianza con EEUU y la OTAN.
(Con información de Reuters)
