El viernes por la noche, el grupo mercenario ruso Wagner culpó a las fuerzas militares de Vladimir Putin de haberlas atacado e inició su marcha sobre Moscú, dejando a Rusia al borde de una guerra civil. Tras arduas negociaciones, se logró desarticular la revuelta y garantizar la seguridad de los miembros de la empresa militar liderada por Yevgeny Prigozhin, quien se encuentra exiliado en Bielorrusia.
Esta situación crítica, afirma la OTAN, muestra el “error estratégico” de Putin al iniciar en febrero de 2022 la “operación militar especial” que implicó la invasión de Ucrania y el inicio de una guerra que lleva ya 16 meses, con la latente amenaza del uso de armas nucleares.
Este lunes, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseveró en una rueda de prensa en Vilna (Lituania): «Los acontecimientos del fin de semana son un asunto interno de Rusia y una demostración más del gran error estratégico que cometió el presidente Putin con su anexión ilegal de Crimea y la guerra contra Ucrania».
En ese sentido, afirmó también que la alianza militar está siguiendo de cerca los movimiento de Bielorrusia, aliado de Moscú, que dio protección a Wagner y a donde Putin movilizó armas nucleares, con destino a la frontera con Ucrania. Sin embargo, descartó que se tema una inminente utilización de esos misiles con capacidad nuclear.
Rusia y sus mercenarios llegaron a un acuerdo para evitar “un baño de sangre”
«No vemos ningún indicio de que Rusia se esté preparando para utilizar armas nucleares, pero la OTAN permanece vigilante», sostuvo, confiando en el poder de disuación de la alianza del Atléntico Norte.
Asimismo, sobre este punto, Stoltenberg reiteró que los países miembro mantendrán su apoyo a Ucrania por “el tiempo que haga falta”. «Si Rusia cree que puede intimidarnos para que dejemos de apoyar a Ucrania, fracasará», enfatizó.
Y es que lo cierto es que los tiempos de la adhesión formal de Ucrania a la OTAN parecen haberse acelerado tras la crisis interna del Kremlin. El jefe del Estado Mayor Presidencial ucraniano, Andrey Yermak, aseguró que la invitación para incorporarse es inminente.
«Posición de Ucrania: el resultado esperado es recibir una invitación para la adhesión simplificada en la cumbre de julio. Pero, sobre todo, nos gustaría recibir una señal absolutamente clara que estableciera el camino de Ucrania hacia la adhesión a la OTAN», declaró el funcionario.
(Con información de Reuters)