POR LUCIANA BONOMO
La cuarentena cambió muchos de nuestros hábitos de consumo, y la gastronomía tuvo que adaptarse también a los nuevos tiempos. Primero con los deliverys y la posibilidad de disfrutar de la alta cocina y coctelería en casa. Probablemente en un futuro cercano con la opción de ofrecer unas pocas mesas adentro de los locales (como se cree que podría anunciar el jefe de gobierno porteño). Y desde hace unas semanas, con las veredas porteñas como el escenario central de bares y restaurantes en donde puede respirarse mediante la distancia y los barbijos al aire libre algo (o mucho) de la tan comentada nueva normalidad.
Los “speakeasy” que rememoraban los bares de la Ley Seca y fueron furor los últimos años, los bares ocultos tras una puerta o una fachada, o simplemente aquellos que sólo abrían de noche con tragos de autor y algún tapeo, hoy ofrecen desayunos y café de especialidad, brunch, pop-up gastronómicos y otras novedades, conservando su esencia pero sumando nuevas experiencias para el público.
FLORERÍA ATLÁNTICO, EN FUSIÓN CON ROTISERÍA
“Desde hace tiempo me preguntaban por qué no hacía algo arriba, y para mí la magia de Florería y todo lo que pasaba abajo era muy difícil transferirlo a una vereda. Después de seis meses sin abrir, tanto lo económico como la necesidad de movernos nos empujó a salir a la superficie, por decirlo de alguna manera, y cuando pasan estas cosas uno se da cuenta de que estaba equivocado, que si bien Florería y su magia de bar escondido en un sótano porteño tiene un encanto especial, podemos subir algo de ese encanto transformándolo y adaptándolo a un espacio al aire libre”, cuenta Tato Giovannoni, creador de Florería Atlántico, elegido justamente ayer mejor bartender del mundo según el ranking de “The 50 best bar”.
Ubicado en la hermosa calle Arroyo, Florería Atlántico estuvo desde su apertura en 2013 oculto tras una puerta en el sótano de una florería. Hace tres años, con la reforma de la calle Arroyo, se habilitó la vereda para que funcionara Rotisería Atlántico, pero hasta ahora los dos proyectos no habían convivido como lo hacen hoy. “Estamos abiertos desde las 10 de la mañana hasta las 12 de la noche, que es lo que hoy se permite, y en los distintos horarios van pasando diferentes cosas, con desayunos y cafetería, que no eran nuestro fuerte, después hay un menú de almuerzo clásico de Rotisería, y a las 18 se suman los marineros de Florería para hacer un “takeover” sobre la vereda, y se agregan opciones de coctelería, algo de la carta nueva que no habíamos podido presentar por la cuarentena, y nuestros platos icónicos», agrega Tato, creador también del Gin Príncipe de los Apóstoles y uno de los primeros impulsores de los cócteles enlatados.
“El mayor desafío fue encontrar la forma de ambientar, poniendo luces diferentes y dos carros para el servicio de mesa. Lo que trasladamos es el espíritu marinero a la calle y no el espíritu speakeasy», cuenta.. Los sábados, además, ofrecen “almueryunos” (la denominación argentina del “brunch”).
Florería Atlántico: Arroyo 872
THE HOLE: LOS GUARCIACÁRCELES EN LA VEREDA
The Hole es uno de los speakeasy más exitosos de Buenos Aires, con una ambientación inspirada en la cárcel de Alcatraz y una impronta netamente nocturna. Durante la cuarentena fue uno de los primeros bares en ofrecer delivery de cócteles envasados y de los primeros también en “salir a la calle”, primero con una barra móvil y algunas mesas y ahora con un deck con fuegos, sillones y plantas, que te trasladan a una atmósfera totalmente diferente. “Tenemos una de las mejores barras de Buenos Aires, y ahora queremos ser la mejor vereda”, afirma Martin Suaya, su bar manager.
Para diferenciarlo del concepto original del lugar, llamaron “The Street by The Hole” al espacio que funciona al aire libre, y ampliaron también el horario de servicio. Los días de semana abren de 18 a 24, mientras que los fines de semana arrancan al mediodía.
The Hole: Armenia 1743
TRES MONOS: CAFÉ, PASTELERÍA Y BRUNCH
La cafetería de especialidad tomó mucho protagonismo en los últimos tiempos, y siempre tuvo, con la coctelería, un relación cercana. Eso llevó a Tres Monos – el bar de Sebastian Atienza y Charly Aguinsky, reconocido como uno de los mejores cuatro nuevos bares de todo el mundo en el concurso Tales of the Cocktail- a ampliar su oferta y ofrecer café de Negro Café y pastelería de Salvaje Bakery desde la mañana, primero para take away y ahora en la vereda, con una propuesta que dejó de ser netamente nocturna y recibe a los clientes de siempre pero también a familias y gente mayor.
“La vereda funciona muy bien, nosotros fuimos de los pocos lugares que nos agrandamos y crecimos en cuarentena así que estamos más que felices. Ahora tenemos el deck en la calle y el bar está lleno todos los días de la mañana hasta las 12 de la noche. Nos gusta mucho el café de especialidad e incluso a principio de año habíamos estado buscando local para poner una cafetería pero no tuvimos suerte”, explica Seba Atienza. “Esta pandemia nos dio la posibilidad de hacer todo lo que nos gusta en el mismo lugar y aprovechar todos los turnos del local con la misma estructura, así que nos cierra por todos lados”, agrega.
Los domingos, los “monos” ofrecen también sus “almueryunos”, con pop-up de restaurantes amigos (ya pasaron por su cocina los chefs de Niño Gordo y Americano BA) y ahora van a renovar también la carta de la mano de Leo Lanussol, uno de los dueños de Proper. “La idea es levantar nuestra vara con la gastronomía y también tener una buena propuesta de día. El brunch es una presentación de todo lo que va a pasar en el bar de ahora en más, porque no sabemos qué va a pasar con la nocturnidad y con lo que era Tres Monos hasta ahora. Se transformó en algo más gastronómico”.
Tres Monos: Guatemala 4899
EL PURGATORIO: EN BUSCA DE EVENTOS POP UP
En El Purgatorio, un speakeasy que inauguró en 2019 y funciona con membresía, decidieron no salir al exterior. “Es imposible pensar en el Purga en la vereda. Lo que hicimos fue sacar algunas mesas afuera de Gula (la bombonería que funciona como fachada del bar) y ampliar un poco la oferta que teníamos ahí”, dice Gastón Abramoff, uno de los dueños. Mientras tanto, las cenas temáticas y cócteles de autor se ofrecen por delivery. Pero el misterio que rodea al bar se mantiene para tener a sus miembros a la espera: “Hay intención de hacer activaciones pop up en locaciones secretas con nuestros miembros, notificándolos a través de la app. Falta poco”.
Gula: El Salvador 4677