Este domingo pasado, a una semana de las elecciones primarias, la Alianza de Iglesias Evangélicas, llamó a “orar en unidad por nuestro país”. El conglomerado cristiano que todas las fuerzas políticas intentaron conquistar finalmente hizo pública su postura de cara a la contienda electoral.
La convocatoria instaba a orar por “las elecciones nacionales, la economía del país, paz, unidad y trabajo” y, a pesar de los acercamientos que muchos candidatos tuvieron en los últimos meses, ninguno logró cooptar el preciado voto del sector.
«Ante la proximidad de un nuevo acto eleccionario nos parece oportuno y necesario ratificar la posición de ACIERA (Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina) como entidad que representa a un sector significativo de la iglesia evangélica en el país», empezó el comunicado que publicó la agrupación titulado «Elecciones 2023: Hacia un voto responsable«.
El movimiento tuvo importantes incidencias en el resultado de elecciones en nuestra región; incluso en Brasil, cuando Jair Bolsonaro casi gana la presidencia frente a Lula Da Silva con el apoyo evangélico.
«Nos llena de esperanza que personas con una fe evangélica decidan dedicar sus vidas al servicio al prójimo, mediante la participación política. A ellas las animamos a que ejerzan su sana vocación por el bienestar. Al respecto, siempre hemos recomendado no mezclar o confundir las funciones pastorales con la vocación por la cosa pública», afirmaron.
Respecto del mensaje a sus seguidores –casi 7 millones de argentinos, el 15 por ciento de la población-, la alianza fue contundente y afirmó que ningún espacio político puede representarla.
«Nuestras comunidades de fe contienen la más amplia diversidad de posiciones e ideologías políticas, algo que implica para nosotros una gran riqueza, en tiempos de intolerancia al que piensa distinto. Es por ello que ningún partido político puede representar a las iglesias evangélicas, más allá de los evangélicos que lo integren», expresaron.
