Edith, una argentina radicada hace más de 50 años en Israel, que tiene a su hermano, a su cuñada, a su sobrina y a sus sobrinos nietos secuestrados desde el sábado, contó el momento que está atravesando.
En comunicación con Marcelo Longobardi en Radio Rivadavia indicó: «Yo vivo cerca de Tel Aviv. Somos argentinos y vinimos a Israel hace más de 50 años con la familia» porque «mi hermano siempre quiso vivir en un kibutz, era el sueño de su vida, ahí se casó y nacieron sus hijas».
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Sobre el secuestro precisó que «desde el sábado no sabemos nada de él, ni de su hija ni del esposo de su hija ni de sus nietitos» y manifestó: «No sabemos realmente lo que pasó».
«Yo estuve todo el sábado tratándome de comunicar y no había contestación», marcó y agregó: «Yo hablé con él a la mañana cuando sonó la sirena y después no pude hablar más».
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«A la noche muy tarde, dijeron que el Ejército pudo entrar a lo que había quedado de las casas: en un kibutz de 400 personas, hay 160 rehénes y el resto muertos», subrayó y aseguró: «Nos asesinaron familias enteras: quemaron sus casas, del kibutz no quedó nada».
Por lo tanto, afirmó: «Si mi hermano vuelve, no tiene a donde volver» y agregó: «En el kibutz de mi hermano no quedó casi nadie».
Sobre la situación que se vive en Tel Aviv, aseveró que «todo el tiempo hay alarmas en la zona sur» y contó: «Yo hoy ya estuve en el refugio y después pude salir. Esa es nuestra realidad». «No es la realidad de ahora, es la realidad nuestra de hace años y años, 20 y pico de años», resaltó.
En consecuencia, dejó en claro que «la realidad era totalmente distinta cuando mi papá vivía y cambió cuando entraron estos terroristas que son los que gobiernan en Gaza, son los que oprimen al pueblo palestino: no los dejan vivir, trabajar, no se preocupan por sus estudios, por su sanidad, por darles trabajo, por nada».
Al ser consultada si «para ellos esto es un ataque terrorista o una guerra», Edith no dudó y contestó: «Es una guerra». En ese sentido, aseguró: «Por supuesto que Irán está detrás».
Para concluir, le pidió al Gobierno argentino «si puede hacer algo para ayudar a rescatar a los argentinos, que están sobre todo en la zona sur».