El ministro de Economía, Martín Guzmán, recibió a los integrantes de una delegación del Fondo Monetario Internacional (FMI), organismo con el que buscará acordar un programa de facilidades extendidas para el pago de una deuda de US $44.000 millones.
Guzmán, acompañado por el representante argentino ante el FMI, Sergio Chodos, recibió a la delegación del FMI encabezada por la directora adjunta del departamento del Hemisferio Occidental, Julie Kozack; el jefe de la misión del FMI para Argentina, Luis Cubeddu; y el representante residente del FMI en Argentina, Trevor Alleyne.
“Ambas partes consideraron la reunión como productiva. Se espera que la misión del FMI continúe su trabajo y mantenga otros encuentros con autoridades económicas del país en los próximos días”, señaló el Palacio de Hacienda a través de un comunicado.
El nuevo programa daría un margen de, al menos, cuatro años y medio para comenzar a pagar el dinero adeudado e incluiría la presentación ante el Congreso de un programa de consolidación macroeconómico plurianual, en el cual se determinarán las metas fiscales, monetarias y financieras para cumplir con un sendero de equilibrio hasta 2025.
“El staff del FMI y el Gobierno argentino consideran que en las circunstancias actuales, ese tipo de programa es la mejor alternativa disponible”, dijo Guzmán ayer a periodistas de agencias internacionales.
El nuevo programa daría un margen de, al menos, cuatro años y medio para comenzar a pagar el dinero adeudado e incluiría la presentación ante el Congreso de un programa de consolidación macroeconómico plurianual.
Antes de la llegada de la delegación del FMI, el oficialismo anunció que presentará en el Congreso una nueva ley de Movilidad Jubilatoria para que los reajustes se hagan de manera semestral y en base a un índice que combina en partes iguales la variación del salario y la recaudación tributaria, similar al que rigió entre 2008 y 2017.
Además, Guzmán también anticipó que en el transcurso de la semana girará un proyecto de ley al Congreso para fortalecer la sostenibilidad de la deuda pública, en la que se propondrá que todos los préstamos en divisas extranjeras deberán tener previamente la aprobación del Parlamento, al igual que los programas que se negocien con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En lo que respecta a la misión, desde el Fondo destacaron que “no hay fechas establecidas para finalizar las negociaciones», aunque fuentes consultadas por Télam precisaron que la delegación podría permanecer dos semanas en el país.
Kozack y Cubeddu ya visitaron la Argentina a principios de octubre último y en aquella oportunidad la misión concluyó que «el personal técnico acogió con satisfacción el compromiso de las autoridades con las políticas para asegurar una consolidación fiscal favorable al crecimiento y al mismo tiempo proteger a los más vulnerables».
Durante su estadía en el país, los enviados del FMI analizaron las cuentas públicas, las demandas del sector privado y el dañado entramado social tras varios años de caída de la actividad económica y el efecto de la actual pandemia.
También escucharon a dirigentes de la oposición, a representantes del sector privado, de los sindicatos y a economistas, entre otros actores de la sociedad civil.