El secretario general del Movimiento Evita y exfuncionario del Gobierno de Alberto Fernández, Emilio Pérsico, criticó fuertemente las políticas de contención social del presidente Javier Milei en un contexto de licuación de los ingresos de los trabajadores argentinos.
En diálogo con Ramón Indart, en Radio Splendid AM990, el dirigente social afirmó: “No hay ninguna política compensatoria por parte del Gobierno de Milei. No hay más política alimentaria. Si desde diciembre no hay entregas, es obvio que en el merendero no van a tener nada. Es ridículo lo que plantearon. Como Gobierno, son buenos panelistas».
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Asimismo, aseveró que “dicen que van a inspeccionar pero echaron a todo el personal para el relevamiento de campo”, al tiempo que “cerraron la web para el potenciar trabajo” y “no hay ninguna política de control».
«Las del potenciar trabajo son bajas mal hechas. De esas 25.000, dieron de alta 9.000 que estaban mal hechas. El Gobierno piensa que los pobres son pobres por su incapacidad. No hay una política para integrar a los grandes movimientos populares», expresó Pérsico.
Siguiendo esa línea, aseguró que los subsidios y planes sociales no son el camino, pero que ayudan a resolver las urgencias de una población golpeada por la inflación crónica. Agregó: “Lo que es malo, en Argentina, es creer que el subsidio resuelve el problema de la pobreza. Nosotros criticamos a la Tarjeta AlimentAr en su momento. Es una política equivocada porque ni los niños ni los ancianos tienen capacidad de pelea en esa política definitiva».
Finalmente, sostuvo que la visión y las políticas de Milei están teniendo fuerte impacto en la gente, lo que podría costarle el apoyo popular conseguido en las últimas elecciones; en cambio, consideró que Cristina Kirchner podría capitalizar ese descontento. “Parecería que los pobres, para Javier Milei, tienen la culpa de su pobreza. Que Cristina no salga a hablar es una estrategia de ella. Está activa e intentando construir una alternativa a esto. Ni Milei aspira a una relección. Sería un milagro que aguante cuatro años», concluyó.