«Converger» significa «tender a unirse en un punto», y eso es justamente lo que busca llevar adelante Cushman & Wakefield, empresa global de servicios inmobiliarios corporativos, en conjunto con Gabriel Lanfranchi, fundador de Urbanteo, con el proyecto «Distrito de la Convergencia» en Avenida Libertador y Udaondo, en pleno barrio de Núñez, ciudad de Buenos Aires.
En una charla en el Centro Empresarial Libertador (CEL), a la que asistió Newsweek Argentina, Cushman & Wakefield explicó que cada uno o dos años generan un informe sobre una zona específica y en este caso eligieron Libertador y Udaondo porque hay una tendencia de las empresas a mudarse al Corredor Libertad, teniendo en cuenta la cercanía con el Parque de Innovación. Es por eso, que según afirmó, «resulta una zona particularmente atractiva para desarrolladores y ocupantes».
¿Qué se busca hacer en esta área? El objetivo es darle a la zona el carácter de una micro ciudad, una ciudad de 15 minutos en donde «cada necesidad puede ser suplida en un radio de 15 minutos». Además contribuyen a su atractivo la accesibilidad y la presencia de instituciones educativas.
De esta manera, el propósito es que la gente pueda vivir y trabajar en un mismo lugar y sea una ciudad en la que puedan movilizarse ya sea a pie o en bicicleta en 15 minutos.
En el estudio realizado, Cushman halló cinco convergencias:
–Innovación/ tradición: el objetivo es que coexistan las antiguas edificaciones con las nueva construcciones. Estableciendo así «un ecosistema renovado para quienes busquen una zona dinámica de la ciudad para vivir, estudiar y trabajar».
– Proximidad/cercanía: la Avenida Libertador y la Avenida Figueroa Alcorta la unen con el centro y con el municipio de Vicente López. Las avenidas Lugones y Cantilo conectan con la avenida General Paz y el Acceso Norte.
También está la presencia del ferrocarril: estación Ciudad Universitaria de la línea Belgrano Norte y Núñez de la línea Mitre, que finalizan en Retiro o en Tigre. Por último, la movilidad mediante el subterráneo con la línea D, estación Congreso de Tucumán que culmina en Catedral y la variedad oferta de colectivos.
– Barrio/metrópolis: la idea es la combinación de las casas bajas con edificios altos, es decir, viviendas y oficinas en el mismo lugar.
–Ciudad/ naturaleza: aquí se mezclan los desarrollos inmobiliarios con los espacios verdes. En este último punto, ellos vieron en esta área «una continuación de los Bosques de Palermo».
–Razón/pasión: la pasión está vinculada a las instituciones de prestigio, como la UBA, la UTDT y la escuela ORT. Además se van a incorporar dentro del Parque de Innovación, los edificios del ITBA y la UTN.
Es así como definieron a Libertador y Udaondo como «el epicentro de un fenómeno que está transformando la mirada sobre los espacios de trabajo» y también como «un punto de encuentro perfecto para eventos de la zona».
Consideran que «esta zona está evolucionado para reunir e integrar diferentes elementos muy valorados: oficinas de vanguardia, comercios, instituciones educativas y deportivas, oferta gastronómica y de entretenimiento y espacios verdes», es decir, «combinar distintos conceptos ligados a lo arquitectónico, lo urbanístico y lo cultural».
«Las funciones sociales básicas en una ciudad son trabajar, educarse, proveerse, mantenerse en forma y entretenerse», precisó Herman Faigenbaum, CEO de Cushman & Wakefield de Sudamérica.
Indicó que «estudios recientes realizados en la ciudad de Buenos Aires comprobaron que en la zona de Libertador y Udaondo convergen todas las características que permiten a las personas un muy alto nivel de acceso a estas funciones en un radio de 15 minutos a pie o en bicicleta desde su lugar de residencia».
Por su parte, Rafael Valera, director de Brokerage, manifestó que «se espera que las empresas que allí se radiquen traccionen una mayor oferta de servicios, generando a la su vez nuevos empleos que impulsarán una mayor oferta gastronómica y comercial».
Foto: Cushman & WakefieldHoy cuenta con 406.432 metros cuadrados construidos y de ese número, el 47% es residencial, 28% corporativo y 25% corresponde a edificios educativos. En el futuro, la idea «es que se sumen otros 479.544 metros cuadrados más, que se distribuirán de la siguiente manera: 62% habitacional, 20% educativo y 18% corporativo.