El Gobierno nacional anunció que el próximo 30 de junio habrá una nueva ola de despidos en el Estado, aunque aún no se determinaron cuántos serán las personas afectadas.
En conferencia de prensa, el vocero presidencial Manuel Adorni señaló que aunque los gremios advierten que la cifra rondará los 50.000 empleados, esa cifra es “incorrecta”.
“Tal vez a lo que se quisieron referir es a lo que siempre dijimos, que había un universo en torno a los 70.000 contratos que estaban en permanente revisión. De esos 70.000 contratos, se habían contabilizado cerca de 23.000 que habían sido dados de baja y que el resto seguían en revisión permanente. El 30 de junio será otra barrida y otra limpieza que se le dé a ese universo”, explicó.
Adorni también remarcó que los contratos que continúen vigentes serán “por un tiempo determinado y se seguirá evaluando cada uno de los casos” para que el recorte sea “de una manera absolutamente quirúrgica para no cometer ningún tipo de error”.
“Por supuesto, que el objetivo acá no es que nadie se quede sin trabajo, sino que se queden trabajando los que efectivamente tienen una función válida, útil y que agregue valor. Y los que no, o los que no tengan funciones, no tienen por qué quitarle un solo peso del bolsillo al contribuyente”, agregó.