A los 28 años falleció Sammy Basso, el científico italiano que se hizo reconocido en todo el mundo por ser la persona más longeva con progeria, una extraña enfermedad que solo afecta a 1 de cada 20 millones de personas.
La noticia fue confirmada por la Asociación Italiana Progeria Sammy Basso (AIPROSAB), fundada por él mismo, que publicó un comunicado en sus redes sociales en el que revelaron que murió el 5 de octubre.
Si bien no revelaron la causa de su fallecimiento, mencionaron que ocurrió “repentinamente, después de un día de celebración rodeado del cariño de quienes lo amaban”.
“Estamos profundamente agradecidos por el privilegio de compartir una parte de nuestro viaje con él. Él nos enseñó a todos que, aunque los obstáculos de la vida a veces parecen insuperables, vale la pena vivirla al máximo”, expresaron.
Basso había regresado hace pocos días de un viaje a China, en donde estaba trabajando para disertar sobre la progeria, el síndrome que padecía y al cual se dedicó a estudiar y difundir en el mundo.
Sammy nació en 1995 en Italia, y fue diagnosticado con progeria de Hutchinson-Gilford cuando tenía dos años, una enfermedad que produce un prematuro envejecimiento del cuerpo.
Sin embargo, esto no lo frenó de tener una vida relativamente normal, ya que pudo culminar sus estudios secundarias con un diploma científico y cursar en la universidad carreras de Ciencias Naturales y Física.
En 2005, con apenas 10 años, fundó junto a sus padres la Asociación Italiana Progeria Sammy Basso (AIPROSAB), con la cual buscaba visibilizar esta condición y recaudar fondos para investigación científica, con la mira en contribuir a los avances para conocer más sobre su síndrome.
