Con una tendencia positiva, la inflación en octubre podría posicionarse por debajo del 3%, marcando un nuevo mínimo en la gestión de Milei: el presidente se entusiasma porque cree que su estrategia económica empieza a mostrar resultados más que tangibles.
En el Palacio de Hacienda entienden que la economía argentina sigue dando señales de optimismo, y octubre se perfila como un mes clave para seguir avanzando en el programa de gobierno. Según las últimas mediciones de consultoras, la inflación del décimo mes del año podría cerrar en torno al 2,8%, lo que no solo representa una disminución respecto al 3,5% registrado en septiembre, sino que también sugiere que la administración de Javier Milei está empezando a cosechar los frutos de su programa económico.
PriceStats, dirigida por Alberto Cavallo, adelantó que la inflación de octubre apuntaba a una cifra inferior al 3%, con un 2,36% en los precios no regulados; ese recorte podría indicar que el número final sea un poco mayor pero de todos modos es un muy buen pronóstico. EcoGo, destacó que la inflación se encuentra alineada con el objetivo del Gobierno de acercarse a un número mensual del 2%. Las estimaciones de la consultora están en torno a un 2.8%.
La posibilidad de que el número de inflación del mes de octubre se ubique con un 2 por delante es un dato más que relevante, porque marca un acercamiento del nivel del crawling peg con la inflación y es clave esa convergencia para avanzar en una de las metas más ambiciosas del actual Gobierno: levantar el cepo cambiario.
Las consultoras Equilibra proyectó un 3,1% y Analytica un 3,2%; si bien no exponen en sus mediciones una baja tan considerable como otras, si representa una mejora respecto del 3,5% del mes de septiembre.
La baja en la inflación se ha visto impulsada por varios factores, entre ellos la estabilidad en los precios de los servicios públicos y la reciente disminución en el precio de los combustibles. El caso de alimentos es particular porque varias mediciones marcan un número por encima del nivel general y claro esto afecta directamente a los sectores más vulnerables por el impacto del aumento de precios en la Canasta Básica Alimentaria.
En este sentido pueden plantearse algunos desafíos para los últimos meses del año: uno de ellos que no logre sostenerse la desaceleración en los precios de los alimentos, también un nuevo aumento en los precios de los combustibles y finalmente que hará la gestión con las tarifas de servicios públicos que, aun con camino por recorrer, intentan sincerar y evitarle al gobierno un mayor gasto en la compensación de las tarifas.
Si bien las diferentes consultoras han coincidido en la tendencia a la baja de la inflación con ligeras variaciones en sus estimaciones, los economistas sostienen que los últimos meses del año son estacionalmente inflacionarios por lo que, si bien la tendencia es positiva, podría cambiar rápidamente.
Sobre octubre, hay consenso con que el IPC cerrará por debajo del 3,5% alcanzado en septiembre; claro que será una buena noticia para el Gobierno porque este dato podría influir positivamente en la imagen de gestión de gobierno y en las expectativas económicas a futuro de los votantes. Cabe destacar que los informes de las consultoras de opinión pública detallan que si bien la inflación se eliminó del primer lugar en el top de las preocupaciones de los argentinos, sigue siendo una muy relevante.
El descenso de la inflación puede tener importantes implicaciones políticas para Javier Milei y su administración. En un contexto donde la economía ha sido un tema central en la agenda pública, la mejora en los índices de inflación podría traducirse en un aumento en la aprobación popular y en la estabilidad política del Gobierno. Milei, quien ha prometido transformar la economía argentina, verá en estos datos un respaldo a su gestión.
Sin embargo, el desafío sigue siendo grande. La sostenibilidad de esta tendencia a la baja requerirá no sólo de políticas eficaces, sino también de factores externos que podrían cambiar rápidamente las expectativas. La evolución del tipo de cambio, la relación con el Fondo Monetario Internacional y también el contexto económico global serán elementos clave a observar en los próximos meses.
En resumen, el número de octubre traerá consigo buenas noticias para Javier Milei, con una inflación que parece haberse desacelerado a niveles por debajo del 3,5%. Aunque los desafíos persisten, los datos actuales ofrecen un respiro y una oportunidad para consolidar políticas que continúen en esta dirección.
