Donald Trump se convirtió en el nuevo presidente de Estados Unidos y lo celebró con un festejo en su búnker en West Palm Beach, en Florida. Luego de haberse confirmado su victoria en el estado de Pensilvania, el candidato republicano dio su primer discurso como mandatario electo ante una multitud.
“Esto es un movimiento como nunca antes se ha visto. El movimiento más grande político de este país y quizás de la Tierra. Y ahora va alcanzar un nuevo nivel de importancia, porque vamos a ayudar a nuestro país a sanar”, expresó.
La revancha: ganó Donald Trump y volverá a ser presidente de los EEUU
Trump señaló que los resultados le dieron “una victoria política que nuestro país nunca vio”. Y agradeció al “voto popular” por acompañarlo: “Esta campaña ha sido tan histórica que hemos construido la coalición más fuerte y unida en toda la historia, tenemos mujeres, hombres, de ciudades y zonas rurales. Vienen de todos los rincones: afroamericanos, latinoamericanos, asiáticos americanos, musulmanes americanos”.
Resaltó que los ciudadanos le dieron “un mandato poderoso”, ya que tendría el control en ambas cámaras del Congreso. “Esta será la era dorada de Estados Unidos”, afirmó.
“Somos el partido del sentido común: queremos fronteras, seguridad, educación, milicia poderosa y no tener que usarla. Nosotros derrotamos a ISIS en tiempo récord y no la hemos usado más. La gente teme que yo inicie guerras y no lo haré. Lograremos un futuro más increíble. Ahora podemos ayudar a nuestro país”, enfatizó.
Trump hizo mención al ataque que sufrió en uno de sus mítines, al asegurar que “Dios me salvó la vida por una razón y eso fue devolver a Estados Unidos a la grandeza”.
“El desafío no es fácil pero voy a dar toda mi energía, espíritu a esto, porque este trabajo que me dieron es el más importante del mundo. Como en mi primer mandato, gobernaré bajo el mismo lema: promesas que se hacen, se cumplen. Nada me detendrá de mantenerlos libres, prósperos y poderosos. Espero que todos me acompañen en este noble trabajo”, remarcó.