El nuevo Gobierno de Siria adelantó cómo será su gestión y prometió instaurar un «Estado de derecho» luego de que el régimen de Bashar Al Assad fuera derrocado.
Un portavoz del gobierno sirio, Obaida Arnaut, aseveró que las nuevas autoridades buscarán instalar un «Estado de derecho».
En diálgo con la agencia AFP, advirtió que «todos los que cometieron crímenes contra el pueblo sirio serán juzgados conforme a las leyes» y anticipó que la nueva gobernación va a «congelar la Constitución y el Parlamento» en principio durante un período de transición de tres meses.
«Se formará un comité jurídico y de derechos humanos para examinar la Constitución e introducir enmiendas» explicó y al ser consultado sobre las libertades personales y religiosas, aseveró: «Nosotros respetamos la diversidad cultural y religiosa en Siria».
En la misma línea, el primer ministro sirio, Mohamad al Bashir, designado en ese cargo hasta el 1 de marzo, sostuvo: «Garantizaremos los derechos de toda la población y de todas las confesiones en Siria» en una entrevista con el diario italiano Corriere della Sera publicada el miércoles.
El funcionario llamó a los millones de sirios en el exilio a que vuelvan al territorio para «reconstruir» el país.