El cohete New Glenn, desarrollado por la empresa aeroespacial Blue Origin, completó con éxito su primer vuelo de prueba este jueves desde Florida.
En su misión, transportó un prototipo de satélite diseñado para operar a miles de kilómetros de la Tierra, marcando un hito para la compañía fundada por Jeff Bezos. Este logro representa años de desarrollo y una inversión significativa en tecnología espacial avanzada.
El lanzamiento tuvo lugar en la histórica plataforma del Complejo 36, en la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, un sitio que en el pasado fue clave para misiones como Mariner y Pioneer de la NASA. Con una altura de 98 metros, el cohete lleva el nombre de John Glenn, el primer estadounidense en orbitar la Tierra, y fue diseñado para transportar satélites y, eventualmente, astronautas.
Durante esta misión inaugural, el satélite experimental permaneció en la segunda etapa del cohete, que luego fue colocada en una órbita segura para cumplir con las normativas que buscan minimizar los desechos espaciales.
El propulsor de la primera etapa del New Glenn intentó aterrizar en una barcaza en el Atlántico para ser reutilizado en futuros vuelos, una práctica que ha revolucionado la industria espacial al reducir significativamente los costos.
Por qué Blue Origin canceló por segunda vez el lanzamiento inaugural de su cohete New Glenn
Este lanzamiento, inicialmente programado para el lunes, fue pospuesto debido a acumulaciones de hielo en los sistemas de propulsión, pero finalmente se llevó a cabo con éxito el jueves.
Planes ambiciosos para el New Glenn
Blue Origin proyecta realizar entre seis y ocho lanzamientos del New Glenn este año, con el siguiente programado para la primavera. La compañía ha invertido más de 1.000 millones de dólares en renovar el Complejo 36, ahora una instalación de última generación ubicada cerca del Centro Espacial Kennedy.
El fundador de Blue Origin, Jeff Bezos, presenció el lanzamiento desde el centro de control y destacó que su empresa no busca competir directamente con SpaceX, liderada por Elon Musk. Según Bezos, “hay espacio para muchos ganadores” en esta nueva era de exploración espacial.
El New Glenn se posiciona entre los gigantes de la industria aeroespacial, junto con cohetes como el Vulcan de United Launch Alliance y el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) de la NASA, ambos destinados a misiones a la Luna y más allá. Con una altura de 98 metros, es cinco veces más grande que el New Shepard, utilizado por Blue Origin desde 2021 para llevar pasajeros al borde del espacio.
Mientras tanto, SpaceX, con su Starship de 123 metros de altura, continúa avanzando en sus propios programas, como el desarrollo de cohetes para las misiones lunares del programa Artemis de la NASA.