La Casa Blanca niega haber violado la orden de un juez, emitida este sábado 15 de marzo, que ordenaba frenar las deportaciones de supuestos integrantes de la organización criminal venezolana El Tren de Aragua a la prisión de máxima seguridad inagurada por el presidente, Nayib Bukele en El Salvador.
Esta declaración se de luego de que el gobierno de EEUU de Donald Trump cerrara un acuerdo con El Salvador para trasladar a 300 presuntos miembros del Tren de Aragua a la cárcel de mega seguridad en El Salvador.
El magistrado federal de distrito James Boasberg bloqueó de manera temporal las deportaciones a fin de evaluar las consecuencias de esta decisión y estableció que cualquier avión que ya estuviera en viaje llevando migrantes tenía que volver a Estados Unidos.
No obstante, la gestión norteaméricana comunicó este domingo 16 de marzo que de deportaría a 300 personas supuestamente relacionadas con El Tren de Aragua que estaban bajo custodia de El Salvador.
QUÉ DIJO LA CASA BLANCA
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt explicó que la administración de Trump no incumplió la orden judicial sino que sostuvo que esta no contaba con fundamento legal y que se expidió luego de que estos presuntos criminales ya hubieran sido expulados de EEUU.
«Un solo juez en una sola ciudad no puede dirigir los movimientos de un portaaviones lleno de terroristas extranjeros que fueron expulsados físicamente de suelo estadounidense», argumentó la funcionaria.