Luego de la reunión que este mediodía mantuvo el presidente Alberto Fernández con el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, trascendió que la ciudad de Buenos Aires continúa con progresivas aperturas: puntualmente, en esta nueva etapa del aislamiento, se permitirán que trabajen los bares y restaurantes al aire libre, con servicio de mozos, y el sector de la construcción privada, siempre y cuando sea en obras de más de 5 mil metros cuadrados, o a 90 días o menos de finalizar.
En tanto, el Presidente no habría accedido al pedido de que se retome la actividad del servicio doméstico, ni las reuniones sociales en pequeños grupos y al aire libre.
Respecto a lo que se conoce como «take away plus», en el sector gastronómico esperan con mucha espectativa el protocolo sanitario que terminará de definir la modalidad de atención con la instalación de decks en la calle, utilización de parques y zonas peatonales para la venta de bebidas y alimentos, sin que esto implique un incremento en los contagios.
Se aguarda que el jefe de Gobierno porteño brinde en una conferencia de prensa mayores detalles al respecto.
Respecto a la provincia, no implementaría cambios ni aperturas. A diferencia de las previas extensiones de la cuarentena, en esta oportunidad será el Presidente quien se encargará de comunicar las nuevas medidas en un mensaje grabado que se emitirá más tarde.
