La Iglesia Católica de Argentina pidió a los senadores que reflexionen con conciencia antes de la decisiva votación que tendrá el martes la Cámara Alta de un controvertido proyecto de ley para legalizar el aborto, impulsado por el oficialismo y que ha dividido a la sociedad con una fuerte influencia católica.
Durante una celebración religiosa por el «Cuidado de la Vida Naciente» en la Basílica de Luján, a unos 60 kilómetros al oeste de Buenos Aires, monseñor Oscar Ojea calificó al tema como «ética humana, prereligiosa, sostenido por la ciencia médica y el derecho».
«Virgen Santísima, te pedimos que detengas tu mirada sobre los legisladores que tendrán que decidir sobre un tema de delicadeza tan extrema; que puedas provocar una serena reflexión en sus mentes y en sus corazones, que no renieguen de sus convicciones más profundas», rogó Ojea en su calidad de titular de la Conferencia Episcopal.
Los senadores de Argentina decidirán si convierten en ley el proyecto a favor del aborto, luego que el 11 de diciembre la Cámara de Diputados le diera media sanción al texto, donde se estipula la interrupción legal y gratuita de los embarazos hasta la decimocuarta semana.
Se prevé una muy reñida votación en la Cámara Alta.
De ser aprobada, la norma podría marcar el camino hacia un cambio más amplio en América Latina, región con una gran mayoría católica usualmente renuente a modificaciones legales que afecten a la sexualidad o la familia tradicional.
Ojea puso como ejemplo al expresidente uruguayo, Tabaré Vázquez, quien vetó la ley del aborto en su país: «No se basó en sus creencias ya que se había declarado agnóstico, sino en la conciencia de un médico que sabe perfectamente cuando comienza el maravilloso acontecimiento de la vida humana».
Cuando se trate el proyecto, se esperan masivas manifestaciones en las afueras del Congreso, entre quienes están a favor y se identifican con pañuelos verdes, y en contra quienes lucen pañuelos celestes.
El Parlamento argentino rechazó en otras oportunidades el proyecto para despenalizar el aborto. Una norma similar se votó en 2018, pero tras la aprobación de los diputados fue rechazada en el Senado de la Nación, cámara identificada como mucha más conservadora.
La actual normativa argentina solo permite la interrupción voluntaria del embarazo cuando hay un riesgo grave para la madre o en caso de violación, aunque los activistas destacan que las mujeres muchas veces no reciben atención adecuada, en particular cuando son pobres.