A casi una semana de la muerte de Liam Payne, la familia del cantante de 31 años aún no obtuvo la autorización de la Justicia para repatriar el cuerpo hacia el Reino Unido.
Su padre, Geoff Payne, arribó al país el pasado viernes 18 de octubre, dos días después del trágico fallecimiento de su hijo, quien perdió la vida tras caer desde un balcón ubicado en el tercer piso del Hotel Casa Sur, en Palermo.
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El hombre viajó hacia la Argentina para reconocer el cuerpo y comenzar con los trámites para llevarlo a su país natal y así darle la última despedida. Sin embargo, aún continúa en la morgue judicial.
Esto se debe a que la Justicia aún está determinando las causas de la muerte del ex One Direction, ya que se presume que había consumido sustancias como drogas y alcohol antes de la fatídica caída.
Según The Associated Press, un funcionario del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires indicó que el cuerpo de Liam Payne sería entregado a su familia cerca del 28 de octubre.
Los investigadores hallaron botellas de alcohol y restos de un polvo blanco en la habitación en la que el cantante se estaba hospedando. Además había papeles metálicos, velas, un encendedor, latas quemadas y un sorbete.
Ante este escenario, la principal hipótesis del fiscal a cargo, Marcelo Roma, es que Liam Payne cayó desde el balcón en medio de un posible “brote” en un estado de “semi o total inconsciencia” producto del consumo de drogas.
Tras conocerse los estudios preliminares de la autopsia indicaron que sufrió traumatismos y hemorragias tanto internas como externas, con un impacto mortal en su cráneo.
Aún esperan los resultados de las muestras de sangre, orina y un hisopado nasal para hacer pruebas toxicológicas adicionales; como también la pericia de laboratorio al polvo blanco hallado en la habitación, para determinar si es cocaína.