En el 2020, la vida de Daniella Álvarez dio un giro de 180 grados. En plena pandemia, la modelo que en 2012 representó a Colombia en el certamen Miss Universo, tuvo un problema de salud que la llevó a sufrir la amputación de una de sus piernas.
Cuatro años después de aquel momento, la presentadora de televisión, que este año debuta al mando del reality “Escuelas Imparables”, brindó una entrevista en exclusiva a Newsweek Argentina en la que habló sobre cómo desafía a la discapacidad.
Desde joven, Álvarez soñó con convertirse en Miss Colombia. “Sabía que iba a ser la vitrina o la puerta para poder ser presentadora. Siempre me vi en noticieros, en realities, y era mi sueño. Fui comunicadora social, fui Miss y efectivamente eso me permitió entrar al mundo del entretenimiento y del espectáculo”, contó.
Sin embargo, tras una reconocida carrera, en 2020 su vida sufrió un cambio radical: “En el primer mes de la pandemia me salió una bolita debajo de mi costilla izquierda, y después de hacerme exámenes supimos que tenía una masa que tenía que ser retirada con cirugía. El doctor me dijo que iba a ser sencillo, era sacar esa masita y cerrar. Pero al momento de operar, el doctor tocó la aorta porque la masita estaba pegada ahí, se cerró e hizo una isquemia que llevó a la amputación de mi pierna izquierda”.
“Para una mujer que toda su vida venía siendo imagen para campañas, en la televisión y que vivía de alguna manera de su físico, la gente decía ‘se le acabó la carrera, sea se le acabó su trabajo, se le acabó la vida’. Y no te voy a mentir, yo estando en esa camilla, cuando supe que la única salvación era quitarme esa parte de mi cuerpo, porque tenía una gangrena isquémica, pensé que me iba a tocar replantear todo y tener un plan B”, dimitió.
Sin embargo, aquel hecho le trajo muchas enseñanzas. “A veces en la vida te pasa algo y te toca pensar en un plan B. Pero hoy mi moraleja más importante es que a veces los planes B nos desenfocan de los de los planes A, y la vida misma me dio esa gran oportunidad de continuar en mi carrera”.
Álvarez contó que también tuvo que aprender a sortear dificultades. “Cuando uno siente que hay un fracaso, que hay una gran piedra en el camino, hay que superarla con las fuerzas de Dios, con la fe, con la unión familiar y con todo lo necesario. Todas las cosas suceden por y para algo, y lo importante está en cómo uno asume esa situación para llevarlo a otro nivel más positivo al que llegas con más experiencia, más sabiduría, más fuerza y más resiliencia”.
Además de ser modelo y presentadora, hoy la ex Miss Colombia también se dedica a ser coach motivacional y tiene una fundación a través de la que ayuda a otras personas amputadas a volver a caminar entregándoles una prótesis.
Con respecto a cómo es la mirada de los demás sobre las personas con discapacidad y las posibilidades que estas tienen de desarrollarse, señaló: “Hay muchos tipos de discapacidades, hay diferentes tipos de limitaciones dentro de este mundo. Lo importante es saber que con lo que te queda podes hacer algo positivo y bonito para la vida”.
“En mi caso yo perdí una pierna, pero puedo seguir haciendo otras cosas. Tengo mi mente, mis brazos y el resto de mi cuerpo para seguir haciendo cosas, ¿por qué no hacerlo?”, resaltó.
“Como Miss Colombia tuve la oportunidad durante mucho tiempo de visitar batallones de soldados heridos en combate por las minas. Compartí mucho con gente amputada y nunca me imaginé que algún día yo también iba a ser una más. Y lo bonito es que hoy decidí verme cómo yo veía a esas personas, como cracks, gente superfuerte. La vida es maravillosa, y a pesar de que a veces hay circunstancias que ocurren que no esperamos y no queremos, pasan igual y hay que seguir valorando lo que tenemos”, reveló.
Por otro lado, Daniella Álvarez se refirió a cómo es vista la discapacidad en el mundo del modelaje. “Hoy vivimos en un mundo más inclusivo, con mayor equidad y diversidad, pero todavía falta mucho por avanzar en ese cambio de mentalidad”.
En cuanto a “Escuelas Imparables”, el reality que busca empoderar a mujeres emprendedoras de Latinoamérica para lograr el negocio de sus sueños, destacó que será un desafío para ella.
“Como presentadora nunca había tenido esa oportunidad de no solo ser la que conduce sino también la que es jueza. Aquí vengo a hacer dos tipos de trabajos diferentes, en donde ganarme el cariño y el respeto de cada una de las participantes es como mi mayor reto. Tengo que ser para ellas no solamente la que conduce y les cuenta cómo y hacia dónde vamos, sino también la que se sienta y les dice esto no me gusta, esto pienso de ti, esto pienso que lo puedes hacer mejor”, comentó.
Además, espera que haber sido elegida para conducir este programa también sirva para dar un mensaje de inclusión: “En el mundo hay muchas presentadoras, mujeres bellas, altas, flacas, perfectas, bellísimas, pero me contrataron a mí, que soy una presentadora amputada pero con todas las capacidades para hacerlo. En el reality la gente va a ver mis dificultades para subir un escalón, bajar una montañita de tierra o quitarme la prótesis en algunas circunstancias donde no me la puedo poner. Creo que que es un mensaje muy bonito que estoy segura que la gente va a abrazar y lo va a apreciar”.
