El “cuadro más caro del mundo”, el “Salvator Mundi”, comprado por 450 millones de dólares a cuenta del príncipe saudita Mohamed bin Salmán, probablemente fue pintado en el taller de Leonardo da Vinci pero no por el maestro, según un documental.
Antoine Vitkine, director del documental, que será difundido por la cadena francesa France 5 el 13 de abril, investigó esa obra, comprada en mal estado por 1.175 dólares por un marchante de arte neoyorkino en 2005 y restaurada en Estados Unidos, informó AFP.
En noviembre de 2017, pocos meses después de llegar al poder, Ben Salman adquirió de forma anónima el “Salvator Mundi”, un retrato de Cristo, presentado por Christie en Nueva York supuestamente pintado por la mano de Leonardo da Vinci.
Ese día, Ben Salman compró el cuadro por 450 millones de dólares, convirtiéndolo, con mucho, en el cuadro más caro de la historia.
Anteriormente, la pintura fue autentificada como un verdadero Leonardo da Vinci por varios expertos británicos y vendida a un oligarca ruso, que al cabo de un tiempo decidió revenderla.
En tanto, expertos han expresado sus dudas sobre si la obra no habría sido creada en realidad por los asistentes de Leonardo Da Vinci. Los sauditas pidieron a Francia que un perito examinara el cuadro, pues el Louvre alberga un laboratorio destinado al análisis de obras de artes.
El cuadro habría permanecido allí tres meses. El estudio pericial muestra, según una fuente, que “Leonardo tan solo contribuyó al cuadro”.
Mohamed bin Samán quería prestar la obra al Louvre para la gran exposición dedicada a Leonardo da Vinci de finales de 2019. “Su petición fue muy clara: exponer el ‘Salvator Mundi’ junto a la Gioconda y presentarlo como un Da Vinci 100 por ciento.
Exponerlo en esas condiciones equivaldría a dejar fuera de toda sospecha una obra de 450 millones de dólares”, explicó la misma fuente. Sin embargo, esto no sucedió.
Art News Paper informó sobre la proyección del documental Savior For Sale, dirigido por Antoine Vitkine, en la televisión francesa, que explica por qué no se mostró la pintura de Salvatore Mundi.
Esta cinta proporciona documentación sobre la no autenticidad de la pintura. Mohammed Ben Salman, príncipe heredero de Arabia Saudita, es un derrochador.
En 2015 compró, en Francia, la propiedad más cara del mundo, un castillo de alta tecnología en Louveciennes (Yvelines), por 275 millones de euros.