En una ceremonia privada para alrededor de 20 invitados en el palacio de Windsor, la princesa y su flamante esposo, el italiano Edoardo Mapelli Mozzi, posaron junto a la reina Isabel II y el príncipe Philip.
A quien no se vio entre los invitados más que acompañando a su hija al pasillo de Windsor, es al príncipe Andrés, que fue obligado a dar un paso al costado de la vida pública. Su distanciamiento está vinculado a su amistad con Jeffrey Epstein, el multimillonario empresario condenado por tráfico y abuso de menores, que se suicidó en la cárcel el año pasado.
La princesa usó un vestido vintage prestado por su abuela, la reina, que solo había sido usado un puñado de veces en la década del 60. Además, tomó prestada la tiara con diamantes Queen Mary, que Elizabeth usó el día de su boda.
Fotos: Twitter @theroyalfamily
