Al menos 14 millones de personas en China viven bajo un bloqueo total, ya que el país persiste con una estricta política de COVID de «tolerancia cero» antes de las vacaciones del Año Nuevo Lunar y los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022 .
Los funcionarios de salud pública no se arriesgan en medio de un aumento de las infecciones en todo el país, lo que eleva el promedio de casos de siete días de China a más de 200 por primera vez desde marzo de 2020. Dos ciudades están experimentando una forma de bloqueo total no visto desde los primeros días de la pandemia, cuando el antiguo epicentro, Wuhan, en la provincia central de Hubei, estuvo cerrado durante 76 días.
El lunes, a los 1,1 millones de habitantes de la ciudad de Yuzhou, en el centro de Henan, se les pidió que permanecieran en sus hogares tras el descubrimiento de tres casos asintomáticos de coronavirus. Se han cerrado el transporte público, las escuelas y todos los negocios no esenciales.
Se está realizando una segunda ronda de pruebas en toda la ciudad para identificar la fuente del brote. Para el miércoles, los funcionarios locales habían encontrado 32 casos adicionales, de los cuales 23 eran asintomáticos, que China ha clasificado por separado durante dos años.
También se están realizando pruebas en toda la ciudad en la capital provincial de Henan, Zhengzhou, a unas 50 millas al norte de Yuzhou y hogar de unos 10,3 millones de personas. También el miércoles, la autoridad sanitaria local informó de seis nuevos casos de COVID y 10 más sin síntomas. Un bloqueo en toda la provincia podría estar en el horizonte si los números de casos continúan aumentando.
La Comisión Nacional de Salud de China dijo que el martes se encontraron 41 casos confirmados, y 71 casos asintomáticos, en todo el país, 35 de los cuales estaban en Xi’an, capital de Shaanxi, en el noroeste de China, donde 13 millones de personas han estado experimentando las condiciones de salud pública más estrictas. medidas durante dos semanas.
Los residentes, confinados a sus hogares durante el período de Navidad y Año Nuevo, continúan viviendo bajo las estrictas restricciones, que están poniendo a prueba los límites de la capacidad del gobierno local bajo la política de tolerancia cero. La policía impuso multas, mientras que los videos de las redes sociales mostraron a los ciudadanos restringidos físicamente después de desafiar las reglas de bloqueo para comprar pan . En algunos de los distritos más poblados de Xi’an, los residentes se quejaron de la crítica escasez de alimentos ya que los suministros no llegaron a ellos durante días.
El grupo de casos de la ciudad es el más grave desde principios de 2020, llegando a más de 1,600 infecciones desde el 9 de diciembre, aunque los casos de la variante Delta están disminuyendo. El bloqueo es indefinido, y los funcionarios solo planean aliviar las restricciones después de que finalice la transmisión comunitaria.
La actual situación de salud pública plantea la mayor prueba para la estrategia de cero COVID de Beijing antes del período de vacaciones. Eso comienza en serio con la víspera del Año Nuevo chino el 31 de enero, antes de la cual se espera que cientos de millones de personas viajen a casa en tren, avión, autobús y automóvil.
El 4 de febrero, Beijing 2022 abrirá sin espectadores extranjeros y posiblemente sin fanáticos locales tampoco. Los Juegos de Invierno son un importante evento de poder blando para China en un año en el que se espera que su líder, Xi Jinping , promueva los logros del Partido Comunista de China antes de asegurar un tercer mandato sin precedentes.
El reciente aumento de casos en China no ha estado acompañado de un aumento en las cifras de mortalidad por COVID. El país ha reportado 102,932 casos confirmados hasta la fecha y 4,636 muertes.
Según Our World in Data, China ha vacunado completamente al 84 por ciento de su población.
Publicado en cooperación con Newsweek
