El nadador chino Sun Yang, ganador de tres medallas doradas olímpicas y 11 títulos mundiales, quedó afuera de los Juegos de Tokio luego de haber recibido una suspensión de cuatro años y tres meses, dictada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo de Suiza (TAS), como consecuencia de destruir a martillazos una muestra de su sangre en un control antidopaje en 2018, anunció hoy el organismo.
La sanción, que comenzará a regir desde el 28 de febrero de 2020, finalizará recién en junio de 2024, justo antes del inicio de los Juegos de París, cuando Sun Yang tendrá 32 años, señaló el New York Times.
El episodio sucedió mientras Sun Yang se sometía a un examen en su casa en septiembre de 2018. El atleta chino destruyó una muestra de sangre a martillazos argumentando en su defensa que los responsables de las pruebas no mostraron «los documentos que acreditaban su identidad».
En febrero de 2020, el TAS ya había castigado al atleta con una suspensión de ocho años, la máxima sanción posible. Sin embargo, para asombro de todos, el Tribunal anuló la suspensión en diciembre pasado
Idolatrado en su país, Sun Yang posee tres medallas doradas olímpicas ganadas en Londres 2012 (400 y 1.500 metros libres) y una en Río de Janeiro 2016 (200 metros), además de dos medallas de plata y una de bronce.
Hijo único de una familia de atletas, el nadador se dio a conocer internacionalmente en los Campeonatos del Mundo de Shanghái de 2011, a los 19 años, cuando batió el récord mundial de los 1.500 metros libres, que luego mejoró y sigue siendo el plusmarquista de la distancia, así como de los 800 metros.
Su participación en Río-2016 fue controvertida y tuvo que enfrentarse a la hostilidad de sus rivales, como el australiano Mark Horton, quien lo calificó de «dopado».