El fútbol de Brasil se encuentra en la mira del mundo. En las últimas semanas, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) fue intervenida por la Justicia, y desde FIFA y CONMEBOL advirtieron sobre una posible sanción que podría culminar en una suspensión.
El pasado 7 de diciembre, un tribunal de Río de Janeiro destituyó al presidente de la entidad, Ednaldo Rodrigues, por “irregularidades administrativas” en las elecciones en las que fue electo. Debido a esto, nombró a José Perdiz de Jesus como interventor para tomar las riendas de la CBF para convocar a un nuevo proceso electoral. Algo que no fue bien recibido por la FIFA y Conmebol.
“Ahora nos volvimos a ilusionar”: Argentina ya tiene rivales para la Copa América
CBF
Con un comunicado conjunto, ambas asociaciones señalaron que “enviarán una misión conjunta a Brasil durante la semana del 8 de enero para reunirse con las respectivas partes interesadas y examinar la situación actual y trabajar conjuntamente para encontrar una solución al actual estado de cosas con respecto a la aplicación de las normas de la CBF y su autonomía”.
Las entidades insistieron “enérgicamente” en que “no se tome ninguna decisión que afecte a la CBF, incluidas las elecciones o los nombramientos electorales”.
“Si esto no se respeta, la FIFA no tendrá otra opción que remitir el asunto a su órgano decisorio pertinente para que considere y decida, lo que también puede incluir una suspensión”, remarcaron.
En ese sentido, sumaron que “si la CBF es finalmente suspendida por el organismo pertinente de la FIFA, perdería todos sus derechos de afiliación con efecto inmediato hasta que la FIFA levante la suspensión”, lo que impactaría de lleno tanto a las selecciones como a los clubes que “no podrían participar en ninguna competición internacional”.
De darse esta situación, los clubes brasileños quedarían descalificados de la Copa Libertadores y la Sudamericana. Entre los afectados, estaría Fluminense, último campeón de la Libertadores.
A su vez, podría significar un beneficio para el fútbol argentino, ya que podría recibir cupos para que más clubes puedan clasificar a los torneos internacionales de Conmebol.
Hubo acuerdo con Riquelme y Diego Martínez es el nuevo DT de Boca
