El mundo Boca se vio sorprendido esta mañana por una grave denuncia contra una de las figuras del plantel. Eduardo “Toto” Salvio fue acusado por intentar atropellar a su ex pareja, Magalí Aravena, en un caso que fue caratulado como violencia de género.
De acuerdo a lo que indica el parte policial publicado por Noticias Argentinas, el suceso ocurrió a las 00:50 de este jueves, en la intersección de las calles Azucena Villaflor Y Juana Manso, en el barrio de Puerto Madero. El jugador fue imputado por “Lesiones en contexto de Violencia de Género” y es buscado por la policía.
La ex pareja de “Toto” Salvio relató que hace una semana ambas partes habían decidido «tomarse un tiempo en la relación”, motivo por el cual ella junto con sus dos hijos se fueron a vivir a otro departamento. Ella había concurrido al domicilio del delantero para dialogar, pero al arribar al lugar habría visto al delantero con otra mujer.
Aravena señaló que en ese momento “se colocó delante del vehículo pidiéndole hablar”, pero el jugador de Boca “con intenciones de retirarse del lugar, comienza a avanzar siendo que la mujer impactada con la rueda delantera del vehículo en la pierna derecha”. Por el caso, las autoridades policiales emitieron una orden de detención.
La mujer tuvo que ser asistida por médicos del SAME, ya que sufrió un “traumatismo por flexión en miembro inferior derecho”. En diálogo con el programa “Esta Mañana”, que se emite por Radio Rivadavia, el titular del servicio médico Alberto Crescenti, relató que solo padeció “una herida de menor gravedad” y “no hubo que trasladarla al hospital”.
Este caso conmocionó a todos en Boca y puso nuevamente en el ojo de la tormenta a la institución, que ha tenido a otros jugadores acusados por delitos en el contexto de violencia de género. Uno de los más relevantes fue Sebastián Villa, quien también denunciado por su ex pareja por lesiones.
Ante los reiterados sucesos, en septiembre de 2021 el club aprobó un protocolo de prevención y acción institucional para “investigar y sancionar las conductas de violencia en razón de género en el ámbito de la institución o que afecten al mismo. El mismo indica que involucra “los comportamientos, acciones, omisiones y conductas” realizadas por todos los actores del club, entre ellos los propios deportistas.