A falta de cuatro fechas para el final de la temporada, el París Saint-Germain se coronó campeón de la Ligue 1. Lionel Messi fue el autor del único gol del equipo en el empate 1 a 1 con el Lens para levantar la copa, pero pese a los resultados obtenidos, el Parque de los Príncipes se mostró apático a los festejos.
Desde la previa, se palpitaba un contexto con una cuota de enojo hacia el club por parte de los hinchas. Hubo silbidos desde las gradas hacia las principales figuras, entre ellas el argentino, a la vez que los ultras del PSG adelantaron que dejarían el estadio al minuto 75 para celebrar el título sin los jugadores.
? ¡Revive lo mejor del #PSGRCL y los festejos de un nuevo título! ?
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— Paris Saint-Germain (@PSG_espanol) April 24, 2022
Esto se vio reflejado en los propios futbolistas, quienes sintieron el desánimo por el poco apoyo que se mostró desde afuera del campo de juego. Tras el pitazo final, no hubo vuelta olímpica ni tampoco una efusiva celebración en el vestuario, como suele ocurrir cada vez que un equipo se corona campeón.
Lionel Messi fue uno de los apuntados no solo por los aficionados del cuadro parisino, sino también por la prensa francesa. Pese a sus nueve goles y 13 asistencias en la temporada, el reconocido diario L’Équipe le dio la puntuación más baja de todo el equipo: 5.30. De igual manera, ninguno de los jugadores superó los 6 puntos.
En el resto del mundo llamó la atención las fuertes críticas que recibieron el astro argentino y sus compañeros incluso luego de alcanzar el título. Y es que si bien volver a ser campeones en la Ligue 1 es importante, desde el club apuntaban algo mucho mayor: la Champions League.
El trofeo continental es el gran anhelo del PSG, que estuvo muy cerca de conquistarlo en el 2020. Con la mira puesta en alcanzar ese objetivo, los dueños apuntaron a crean un equipo de ensueño, con Lionel Messi como uno de sus líderes.
París lo recibió con los brazos abiertos, ya que hubo una ostentosa presentación que incluyó movilizaciones de los hinchas por las calles de la ciudad. Pero poco a poco el sueño se fue derrumbando, hasta alcanzar la dura eliminación a manos del Real Madrid que le impidió pasar los octavos de final.
Todo esto decantó en el enojo especialmente de los ultras, que aseguraron ser los únicos que estuvieron a la altura de las circunstancias en la temporada. Fue en este contexto que la Pulga alcanzó su título número 39, sin dudas el que menos satisfacción le trajo en su carrera.