La tarde en Argentina no terminó tan mal como podría haber terminado, luego de que bien temprano la selección de Lionel Scaloni perdiera 2 a 1 contra Arabia Saudita. Esta tarde, México y Polonia se enfrentaron en su debut en la Copa del Mundo y el resultado de dio algo de oxígeno a la albiceleste.
Con una heroica actuación del arquero Guillermo Ochoa y la dirección técnica del argentino Gerardo Martino, México consiguió un importante empate ante Polonia, que se perfilaba como el mayor rival para la Argentina en el Grupo C.
El combinado mexicano y el europeo empataron 0 a 0, gracias a que Ochoa logró atajar un penal pateado por el delantero del Barcelona Robert Lewandowski, que había sido cobrado a instancias del VAR, en una jugada polémica.
“Fue la única llegada que tuvo Polonia. El partido fue muy difícil, jugamos bien, nunca perdimos el orden y creo que tuvimos que ganarlo. Sabíamos que ganar era imprescindible, ahora cambia el escenario, el segundo partido (ante Argentina) es el decisivo», afirmó Martino.
Más de 30.000 personas coparon el estadio 974, de Doha, para ver el encuentro del que dependía la Argentina para conocer cuáles eran sus chances concretas de pasar a octavos de final.
Tras su sorpresivo triunfo, Arabia Saudita quedó puntera del grupo con 3 puntos; y Argentina última con 0. Con su empate, México y Polonia quedaron en el medio con 1 unidad cada una, dando oxígeno a la Scaloneta, que el sábado a las 16 enfrentará a México. Ahora, los de Lionel Messi dependen de sí mismos: si ganan ambos encuentros, estarán prácticamente clasificados.