Luego de que Wimbledon, uno de los cuatro Grand Slam, decidiera prohibir la participación de tenistas rusos y bielorrusos en la competencia como sanción a Rusia por su invasión a Ucrania, comenzaron a surgir voces en contra de la medida.
Sin embargo, ahora el rechazo se vuelve institucional, y es la propia Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) la que intervendría contra esa decisión, según el periódico británico The Telegraph.
Por pedido de los propios tenistas, la entidad trataría de avanzar por vía judicial para intentar que el All England Club dé marcha atrás con la medida. Pero, en principio, piden que el certamen no sume puntos para el ranking ATP, considerando que es una competencia desleal con los deportistas de los dos países vetados.
Si se concretara ese escenario, Wimbledon 2022 pasaría a ser un gran torneo de exhibición, aunque la bolsa de premios en efectivo ascienda a más de US$ 40 millones.
El presidente del All England Club, Ian Hewitt, había asegurado que la determinación de prohibir la participación de figuras como Daniil Medvedev o Aryna Sabalenka era “la decisión más responsable posible dadas las circunstancias”. Pero sus palabras generaron el rechazo del Consejo de Jugadores de la ATP.
Esta agrupación está conformada por tenistas del calibre de Roger Federer, Rafael Nadal y Andy Murray, junto con otros nueve representantes del circuito (Novak Djokovic había renunciado hace 18 meses prometiendo crear un sindicato independiente), y pidió al ATP World Tour que se compita pero sin puntos.
Ahora, la decisión está en manos del directorio del ATP World Tour. De acuerdo al medio británico, ya estaría confirmado el aval de Andrea Gaudenzi, director ejecutivo de la ATP, que es quien tendría la última palabra.
Entre los jugadores, las posiciones tampoco son unánimes. Hace unas semanas Andy Murray anticipó que se mantendría neutral: “Lo siento por todos. Lo siento por los jugadores que no pueden jugar, y no apoyo ni a un lado ni al otro”.
Esta puja está siendo impulsada por los tenistas masculinos, pero las mujeres se sumarían a esta medida, ya que trascendió que la WTA seguirá los pasos de la ATP.
En ambos casos, el tiempo apremia, dado que la lista de inscripciones cierra la próxima semana, y el Grand Slam se jugará del 27 de junio al 10 de julio.
