Francia decidió prohibir los vuelos cortos internos cuando haya alternativas para viajar en tren, con el objetivo de combatir el cambio climático y reducir la huella de carbono.
El decreto fue publicado este martes en el Diario Oficial francés, luego de llegar a un acuerdo con la Comisión Europea, una consulta pública y el dictamen del Consejo de Estado.
La normativa establece la prohibición de los vuelos de trayectos que cuenten con una alternativa de menos de dos horas y media en tren. Esto afecta a los traslados entre París-Orly con Nantes, Burdeos y Lyon.
Clément Beaune, ministro de Transportes francés, celebró la medida y destacó que “alcanzar la neutralidad en carbono significa intensificar con fuerza nuestra acción en términos de descarbonización del transporte, que aún representa el 30% de las emisiones”.
“Mientras luchamos sin descanso para descarbonizar nuestros estilos de vida, ¿cómo podemos justificar el uso del avión entre las grandes ciudades que se benefician de conexiones regulares, rápidas y eficientes por tren?”, manifestó.
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